2. Copa de cuerpo medio y cuerpo entero. Un globo alto ayuda a transportar el vino a la parte posterior del paladar lo que permite degustar mejor vinos tintos con taninos altos, complejos.
Ideal para Burdeos, Cabernet Sauvignon, Merlot, Malbec, Syrah y coupages.
3. Copa estilizada de tallo largo. La copa al ser alta y estrecha mantiene la concentración de los aromas y sabores. Al mostrar la efervescencia, incrementa la experiencia en vista y el sentimiento festivo.
Ideal para Champagne, Prosecco, Lambrusco y otros vinos espumosos.
4.- Hielera Rombus. Sommeliers coinciden que todos los vinos, incluidos los tintos, se deben enfriar si no se encuentran a la temperatura óptima para su consumo. La diferencia de temperatura, por mínima que parezca puede incidir en el aroma y sabor del vino, de ahí que es aconsejable contar con una hielera.
Otros elementos indispensables son:
5. Vajilla de vidrio. Al ser completamente transparente permite que los platillos luzcan apetitosos a la hora de servirse, el juego debe contar con un tazón bowl (plato hondo), plato extendido (plato fuerte), plato pastel (postre) y tarro cafetero.
6. Domo pastelero con base. Permite que el postre resalte gracias a su altura, además de que puede integrarse como elemento decorativo para aportar dinamismo al montaje.
7. Ensaladera. Las hay rectangulares, redondas y bowls completamente transparentes que -al igual que los demás elementos citados- permite que los ingredientes salten a la vista de todos y se presenten de forma decorativa.
8. Recipientes pequeños. Son importantes para colocar las uvas que representan los doce meses del año con buena suerte y mucha prosperidad.
La cristalería hace resaltar los pequeños detalles. La disposición de las copas, la vajilla y centros de cristal con flores pueden agregar belleza a la mesa para disfrutar de una noche llena de ilusiones.
Te puede interesar: Renueva tu espacio: Tendencias en colores para recibir el 2019
Síguenos en:
Twitter Facebook Instagram Suscríbete a nuestro newsletter semanal aquí
