El emporio hotelero fundado por Sir Richard Branson sumó este año una nueva propiedad a su portafolio: el Hotel Mont Rochelle. Ubicado a menos de una hora de Ciudad del Cabo, nos revela las inusitadas tierras vinícolas de Sudáfrica.   Por Pauline Trann   Franschhoek es un pueblo de tradición vinícola ubicado en la provincia del Cabo Occidental, conocido bajo el mote de “la esquina francesa”. Con una población que no llega a los 20,000 habitantes, se ha convertido en el lugar favorito de aquellos que buscan un lugar tranquilo pero cercano a Ciudad del Cabo para vivir. Sin embargo, ha sido su ecléctica variedad de hospedaje y gastronomía —alberga The Tasting Room, uno de los 50 mejores restaurantes del mundo, según la lista de San Pellegrino—, lo que lo ha llevado a ocupar el título de “la capital de la comida y el vino” de Sudáfrica. En resumen, es el destino idóneo para los bon vivants como nosotros. En este aclamado y pintoresco rincón de África del Sur se ubica el Mont Rochelle, la nueva propiedad del exclusivo portafolio de Virgin Limited Edition de Richard Branson, quien a principios de este año anunció la compra de esta granja vinícola, antigua propiedad de los herederos del famoso emprendedor sudafricano Miko Rwayitare. Con la idea de crear un pequeño pedazo de cielo en la tierra, el magnate inglés adquirió la finca y sus 39 hectáreas, más un viñedo, para convertirlos en un paraíso a los pies de la cordillera de Klein Dassenberg. La propiedad data de 1688, cuenta con 22 habitaciones, incluyendo seis suites, todas dispuestas alrededor del edificio principal con vistas al valle y nombres que evocan las uvas con las que se elabora vino: Shiraz, Merlot, Cabernet, Pinotage. Como es de esperar en un lugar situado en tierra de viñedos, el Mont Rochelle está a sólo 35 minutos en auto de las rutas del vino del oeste, Stellenbosch, Paarl y Somerset, lo que permite explorar esos territorios con una copa de vino en mano. Para los menos aventureros es idóneo reservar mesa en uno de los dos restaurantes del hotel: Country Kitchen, ideal para una comida durante el atardecer o una cena relajada, y Miko, con un ambiente mucho más elegante y menú gourmet. Incluso es posible programar una visita a la bodega para comprender más sobre enología y elegir ante la colección de vinos nacionales e internacionales. Con su estilo rústico, el nuevo Mont Rochelle se unió a la colección de ocho hoteles de Virgin Limited Edition que, junto con sus otras compañías en el sector turístico y aéreo espacial, ha dejado a Richard Branson una fortuna de más de 4,000 millones de dólares. mont_rochelle1

 

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