Tres propuestas de road trip para enamorarte de Quebec

La mejor forma de conocer el corazón de Quebec es andando por sus carreteras. Por ello te recomendamos tres recorridos ideales para adentrarte en sus montañas, lagos y bosques, admirando fauna y flora, y viviendo paisajes, sabores y tradiciones. Si bien la inmensidad de Quebec hace posible viajar por esta provincia canadiense a través de innumerables rutas e itinerarios, estas opciones son imperdibles, ya que abarcan historia, patrimonio, sabores y paisajes en una continua postal panorámica. La península de Gaspé Uno de los motivos más citados por los viajeros cuando viajan a Quebec es lo espectacular de sus paisajes. La mejor manera de vivirlos es a través de sus carreteras. Viajar en auto ofrece a las personas la posibilidad de disfrutar los asombrosos paisajes de esta provincia desde otra perspectiva, sin prisas y con paradas inesperadas que enriquecen y que transforman el alma. En Quebec existen recorridos mágicos como el que va de Bas-Saint-Laurent a Gaspésie Tour. Es un clásico del road trip, alrededor de la península de Gaspé, y para descubrirlo solamente hay que seguir la Ruta 132. El recorrido ofrece 1,235 kilómetros de camino para llegar a Kamouraska desde La Pocatière. Se recomienda hacerlo en por lo menos 10 días para disfrutar y conocer su cultura y sus poblados, entre ellos Rivière-du-Loup, Rimouski, Amqui, New Richmond, Percé, Gaspé, Sainte-Anne-des-Monts y Matane. En este viaje podrás practicar deportes al aire libre, pesca de salmón, avistamiento de ballenas o visitar museos, faros y fuertes que muestran parte de su historia. Si la naturaleza es lo tuyo, puedes vivir de cerca la naturaleza de Quebec en el Parque Nacional Miguasha, que es Patrimonio de la Humanidad. Sigue la ballena por tierra Para recorrer los más de 1,700 kilómetros que bordean el río Saint-Lawrence, se requiere de al menos 13 días para descubrir las maravillas en su entorno, recorriendo la Cote-Nord desde Tadoussac a Blanc-Sablon. En esa ruta podrás conocer 13 especies distintas de ballenas. Por algo es uno de los destinos más importantes del mundo para el avistamiento de ballenas. Al viaje en auto se suman increíbles aventuras como lanzarse en kayak para conocer de cerca la fauna de la costa o admirar la belleza de sus ríos y bosques; también para conocer de cerca a sus habitantes y sus propuestas artísticas y culinarias. Uno de los lugares más icónicos es Baie-Comeau, donde se encuentra el Jardín des Glaciers, o la Reserva Mingan Archipiélago National Park en Havre-Saint-Pierre, que es el mejor lugar para observar al Frailecillo Atlántico, una de las aves marinas más singulares: Una parada obligada es Pointe-des-Monts, donde se encuentra uno de los faros más hermosos de Canadá y donde además te podrás hospedar para vivir el verdadero espíritu del norte de Quebec. El rastro de la cerveza Doce días se necesitan para manejar los 1,125 kilómetros que separan a Saint-André-de-Kamouraska de Baie-Comeau. En esta ruta se pueden conocer más de 100 tipos de cerveza artesanal, hechos de manera local, cada una con una nota especial que denota los sabores típicos de la tradición francesa propios de la región. Las caminatas son el maridaje ideal de esta travesía para descubrir el talento local con sus museos, galerías, boutiques y, por supuesto, sus micro destiladoras de cervezas, dándole a Quebec el toque auténtico y contemporáneo. Algunos de los lugares imperdibles de este recorrido son: en Pohénégamook, visita Le Secret des Dieux; en Rivière-du-Loup, la cervecería Aux Fous Brassant; en Rimouski, Le Bien, le Malt; en Matane, La Fabrique; en Sainte-Anne-des-Monts Le Malbord; en Gaspé visita Frontibus; en Carleton-sur-Mer está Le Naufrageur y en Amqui está La Captive, en un edificio histórico que antes de ser cervecería fue estación de policía y prisión. Te puede interesar: Destinos ideales para visitar por primera vez en pareja Síguenos en: Twitter Facebook Instagram Suscríbete a nuestro newsletter semanal aquí