La Luna llena acompaña la noche y anuncia la preparación de un nuevo comienzo. Para entonces, se ha recorrido un largo camino sinuoso que lastima, a veces desgarra por dentro, el cual consigue reconciliar a las personas con su pasado. Sólo así serán capaces de volver a mostrar su esencia primigenia y disfrutar, sin miramientos, del momento presente.
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Haciendo un lazo con el pasado ancestral de la cultura otomí, que tenía como principal deidad a la Luna, Rosewood San Miguel de Allende aspira a expresar la naturaleza de esta ciudad colonial y llevar el bienestar a una nueva signifiación.
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Para ello, el hotel ha desarrollado una serie de experiencias que pretenden acompañar este viaje al interior del individuo mediante distintos talleres de inteligencia emocional, meditación, pintura y arte, entre otros.
“El concepto de bienestar es un trabajo interno que nadie puede hacer por nosotros”.
LUISA MARTÍNEZ, DIRECTORA DE SENSE A ROSEWOOD SPA
Para dar la bienvenida a una nueva época y liberarse de lo innecesario, Rosewood también ha desarrollado una propuesta de masajes, creados por las propias terapeutas del spa, basados en una herencia prehispánica que fusiona rituales curativos con el misticismo lunar.
El propósito es elevar el concepto de bienestar a un trabajo interno en donde ocurra un punto de inflexión en el amor incondicional que cada persona se debe profesar a sí misma.
La programación de experiencias cambia cada mes y debe reservarse con antelación. En agosto está programado el taller-meditación “Sanación energética” y, en septiembre, el tema estará enfocado en el “Soundhealing”.
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