En México faltan mujeres ocupando asientos en los consejos de administración. De acuerdo con el reporte 2020 Women On Boards, en el país sólo 225 mujeres pertenecen a consejos de administración, y sólo representaron el 8.7% de los miembros.
Este escenario representa el nivel más bajo en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE); en contraste, Estados Unidos llega al 22.6% y Europa, en promedio, 25.8%.
Con más de 10 años como consejera independiente en empresas de México y Estados Unidos Yvonne Ochoa Rosellini afirma que la brecha de género es sólo uno de los muchos retos a los que se enfrentan las empresas cuando se trata de consejos de administración.
“Tenemos todavía una ausencia de condiciones para que las mujeres puedan participar más activamente. Las mujeres están cansadas. Tras una jornada profesional de 48 horas y otra similar de trabajo doméstico , es difícil que las mujeres encuentren espacios para participar en el consejo”, señala en entrevista.
La conciliación de la vida familiar y corporativa es el primer obstáculo par las mujeres que aspiran a ocupar un asiento en una junta directiva. Yvonne explica que la mitad de las mujeres que trabajan sienten que están abandonando a la familia, y que, para que esa condición cambie, es necesario que las empresas analicen sus dinámicas para dar más espacio a la participación de mujeres en consejos de administración.
“Medidas como la igualdad de salarios, flexibilidad de horarios y espacios de lactancia pueden ser un muy buen inicio para generar las condiciones adecuadas para las mujeres, pero mucho del proceso para alcanzar más asientos en las juntas directivas está relacionado con que las empresas se atrevan a llevar a alguien diferente, que puedan romper esquemas”.
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El Consejo como herramienta
Para Yvonne Ochoa es alarmante que 8 de cada 10 empresas en México no alcancen los 30 años de operación.
“Tener un Consejo eficiente puede ser la diferencia para que una empresa pueda transformarse. Un Consejo que aporte valor y respalde los planes de los empresarios es una herramienta valiosa”.
Para contar con un Consejo que funcione como herramienta es importante que los empresarios se cuestionen de forma honesta si establecer una junta directiva será un movimiento estratégico o si será una medida para cumplir con el requisito.
“El problema inicial es que hay una falta de entendimiento sobre lo que implica un gobierno corporativo. El establecimiento de un consejo permite abrir mercados y aporta nuevos puntos de vista”, explica la ejecutiva.
Para la conformación de consejos eficientes Yvonne Ochoa sugiere que estos tengan una participación de 25% de miembros independientes que puedan aportar puntos de vista imparciales, además de que se busque la participación de un total de entre 5 y 7 miembros.
“Los Consejos de administración pueden ser grandes herramientas para diagnosticar y actualizar planes de negocios, sin embargo, parece que todavía queda un largo camino para que sean vistos de forma seria como tal”, advierte.
