GEA-ISA confirma tendencia alcista de AMLO en su encuesta
En el último mes, la gente que supera que las elecciones serán limpias superó a la que dice que habrá fraude.
Andrés Manuel López Obrador incrementó su ventaja en la contienda presidencial y llegó al 46% de la preferencia efectiva, de acuerdo con la más reciente encuesta de las empresas Grupo de Economistas y Asociados (GEA) e Investigaciones Sociales Aplicadas (ISA).
Tras la filtración de una parte de los resultados de su encuesta presidencial hace dos días, las firmas presentaron los detalles de su ejercicio demoscópico, el cual da, con preferencia bruta, 37% de la intención de voto a López Obrador, 23% a Ricardo Anaya, 17% a José Antonio Meade y 3% a Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”; además, registró un 20% de indefinidos.
Al excluir a estos últimos, las preferencias efectivas de la encuesta levantada del 25 al 27 de mayo dan 46% al abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena-PT-PES), 29% al candidato de Por México al Frente (PAN-PRD-MC), 21% al de la coalición Todos por México y 4% al candidato independiente.
López Obrador incrementó sus apoyos a nivel regional sobre todo en el norte del país –pasó de 32 a 45%–, así como entre mujeres –de 35 a 49%– y entre adultos mayores –de 26 a 46%–.
En contraste, las preferencias por Anaya permanecen sin cambios entre los distintos grupos de votantes y en el caso de Meade, recuperó simpatías en el grupo de votantes más jóvenes pero perdió apoyo en el grupo de votantes más viejos, que había sido su bastión durante la campaña.
El segundo debate entre candidatos presidenciales le fue favorecedor a López Obrador, pues tras éste, 36% de los encuestados dijo que mejoró su opinión de él, contra 26% de Anaya, 17% de Meade y 6% de “El Bronco”.
En la contienda por la Cámara de Diputados, Morena aventaja con siete puntos al PAN, su más cercano rival, y con 11 puntos al PRI.
Entre los resultados de la encuesta de GEA-ISA destaca el aumento significativa de la confianza de la ciudadanía en el cómputo de votos de la elección del 1 de julio, pues ya es más gente la que dice que sí será confiable que la que dice que no.
El mismo caso es para la pregunta sobre si los comicios serán limpios o habrá un fraude.