Los más de 400 mecanismos de cooperación, además de los instrumentos jurídicos, entre México y Estados Unidos serán sometidos a una revisión con el objetivo de mantener los que funcionan y desechar los que no, afirmó Martha Barcena Coqui, quien fue propuesta como la próxima Embajadora ante el país vecino del norte. La funcionaria del servicio exterior mexicanos por más de 40 años señaló que esta evaluación se implementará de forma coordinada con las autoridades estadounidenses. “Cerca de 70% de estos mecanismos están enfocados en área de seguridad, algunos de ellos funcionan muy bien y otros que no, entonces el reto es que vamos a tener que hacer una reingenieria fuerte de la cooperación para identificar en donde está funcionando las buenas prácticas y escalarlas y lo que no funcione dejarlo morir o matarlo”, apuntó Barcena Coqui, durante su presentación en México Summit 2018, organizado por The Economist. Dicha evaluación y cambios en la relación bilateral estarán apalancados por la reestructuración de la administración pública federal anunciada por Andrés Manuel López Obrador y la creación de la Secretaria de Seguridad Pública, esta última con el objetivo de tener una política de seguridad interna que impulse los lineamientos de cooperación, apuntó. Otro tema importante para la relación entre ambos países será la integración de mecanismos de desarrollo regional que incluyan a Centroamérica, agregó Bárcena Coqui. “Estados Unidos y México han tenido programas de desarrollo durante años con Centroamérica, pero no están vinculados ni orientados a objetivos procesos de migración y desarrollo y hasta hace poco tiempo ni siquiera se reconocía el vínculo entre migración y desarrollo”, dijo. Al ser cuestionada respecto a la posición que asumirá el gobierno de López Obrador frente a los ataques en contra de los migrantes y la población mexicana de parte del presidente Donald Trump, así como sus declaraciones respecto a que México pagará un muro en la frontera en común, Barcena señaló que hasta el momento no se ha abordado ese tema en la comunicación establecida entre funcionarios de ambos países. “A nadie le cabe la menor duda que ningún gobierno va a aceptar pagar ningún muro. Hay líneas rojas que no se pueden cruzar”. Agregó que se trabajará de manera profunda en explicar y promocionar la contribución de los mexicanos a Estados Unidos con sus ciudadanos.

 

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