En esta entrega me enfocaré en los descubrimientos alrededor de la gratitud de los mexicanos(as) hacia los empresarios, y por empresarios me refiero a los hombres de negocios que lideran grandes empresas.   La gratitud es uno de los valores más importantes en el ser humano. Va más allá del dar las “gracias”: implica un sentimiento de reconocimiento del valor que otra persona ofrece, un sentimiento interno y una expresión de la gratitud hacia la otra persona. La gratitud nos ayuda a vivir con emociones positivas, fomenta la paz y la prosperidad, promueve la confianza y la solidaridad. Considerando la importancia de este valor dentro de una sociedad, llevé a cabo un estudio al que denominé “Factor gratitud”, gracias al cual obtuve información relevante alrededor de cómo funciona la gratitud en el consciente e inconsciente de las personas, cómo la hemos aprendido, qué tanto y cuándo la aplicamos, así como el estado de la gratitud de los mexicanos(as) ante las diferentes instituciones y organismos en el país. En esta entrega me enfocaré en los descubrimientos alrededor de la gratitud de los mexicanos(as) hacia los empresarios, y por empresarios me refiero a los hombres de negocios que lideran grandes empresas. No estamos considerando a micro y pequeños empresarios, a quienes consideraremos en columnas subsecuentes. En México se siente y expresa poca gratitud hacia los empresarios. Sin embargo, investigamos las causas detrás de este estado anímico de la población. En primer lugar se vive una in-gratitud o falta de gratitud hacia los empresarios porque éstos controlan grandes cantidades de recursos y, a través de este control, ejercen un control en la población. La población siente que los empresarios ejercen su poder y restringen libertades. En nuestro país, como en muchos otros, gran parte de los recursos (tierra, mercados, recursos naturales, empleo, dinero, ejercicio político, medios y hasta leyes) han tenido, por décadas o siglos, claros dueños o propietarios, y éstos siempre han mantenido un vínculo con los políticos o han sido los mismos. Desde la perspectiva de una mayoría, la mancuerna políticos-empresarios ejerce un control sobre la población y ésta lo resiente. La población tiene claro que a mayores recursos en manos de unos cuantos, menos recursos en manos de ciudadanos, y a menos recursos en sus manos menos libertad. En segundo lugar, algo que afecta la percepción sobre los grandes empresarios es el mal uso que hacen de los recursos: existe una crítica generalizada sobre el maltrato a los ecosistemas en los cuales operan. Adicionalmente, las 1,552 personas que participaron en el estudio expresan una desilusión que obstaculiza la gratitud hacia los grandes empresarios, ya que se percibe que sus productos y servicios son de bajo valor agregado. Para muchos, los bienes producidos por las empresas mexicanas, en general, se perciben malos, ineficientes o simplemente caros. Dos puntos adicionales que surgieron en el estudio, realizado durante 2013 y 2014, fueron que los empresarios no han sido justos al recompensar y reconocer a sus colaboradores, quienes reciben menos de lo que deberían, y que no tienen un claro horizonte de desarrollo. Algo que se les recrimina mucho es su distancia emocional con la realidad, con sus colaboradores, proveedores y clientes; muchos no se preocupan por convivir con ellos, por escucharlos, ya no hablemos de compartir ganancias (que, por cierto, es una obligación legal). En el inconsciente colectivo existe una máxima: “Cuando alguien muestra empatía yo le muestro gratitud; cuando no, no.” Así, la distancia emocional que muestran los empresarios con sus colaboradores, proveedores y público en general, es otra variable que contribuye en la in-gratitud hacia éstos. No dudo que existan muchos y muy buenos grandes empresarios en el país; sin embargo, la opinión no los favorece en lo general. Tal vez están pagando justos por pecadores. La lección que nos debe de quedar es la profunda reflexión que tenemos que hacer como empresarios, no sólo los grandes sino también los chiquitos. A mí, en lo personal, me importa mucho la gratitud, aunque entiendo que habrá otros empresarios a los que no les importe ni les quite el sueño… Gracias por darte el tiempo de leer esta columna.   Contacto: Correo: [email protected] Facebook: rperret1 Twitter: @ricardopeer Página web: Ricardo Perret – Socio Mindcode & Brainscan Mindcode   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

OCDE insta a BCE por compra ilimitada de bonos
Por

El secretario del organismo aseguró que el presidente del BCE debería tener carta blanca para tomar medidas audaces....