Pese a la política energética de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, se considera que sí hay oportunidades para que el sector privado desarrolle nuevos proyectos, pero hay que buscar esquemas que agraden a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Roxana Muñoz, analista para el Grupo de Financiamiento de Proyectos y Gobiernos Locales y Regionales de la agencia calificadora Moody’s, indicó durante su participación en el Encuentro Internacional de Energía México 2022, que las empresas productivas del Estado no cuentan con todos los recursos que se necesita, por lo que una buena señal por parte del gobierno para los privados fue el anuncio de la construcción de un gasoducto marino de CFE en alianza con TC Energía.
“Hay que buscar el cómo sí, qué esquemas le gustan a este gobierno, a CFE y PEMEX”, destacó.
Por ejemplo, en el caso del proyecto con TC Energía, la CFE va a ser dueña de una parte del gasoducto, la participación accionaria de la empresa productiva del Estado tiene de la participación accionaría 15% en toda la sociedad y, a partir de 2026, aumentará su participación en el nuevo ducto de extensión del marino hasta ser propietario del 49%.
“¿Quién tiene el dinero? El privado, pero hay que encontrar este tipo de esquema, en donde CFE es el dueño, porque parecería que esta es la manera que le gusta a este gobierno abrirle las puertas a la inversión privada”, comentó.
Hoy, López Obrador dijo durante su conferencia matutina que se busca la construcción de 5 plantas solares en Sonora, pero esto dependerá de que Estados Unidos acepte que CFE sea el socio mayoritario y que los proyectos sean sean financiados a tasas bajas.
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Por otra parte, la analista de Moody’s aseguró que la agencia no ha rebajado la calificación de ninguna empresa privada por afectación de algún proyecto energético.
“No hemos bajado la calificación de ninguno de los proyectos privados por alguna afectación como tal, entonces, en general hemos visto que el desempeño de éstos en los últimos 4 o 5 años continúa, sí hemos visto afectaciones, por ejemplo, de permisos o de que permanecen clausurados algunos proyectos”, aseveró Muñoz.
Paolo Salerno, especialista del sector energético, apuntó que en México ha cambiado la percepción de la seguridad jurídica por los constantes intentos del gobierno de cambiar las reglas, por ende no se han desarrollado más proyectos.
Por ejemplo, en la energía eólica, la inversión de la eólica en los últimos 4 años ha bajado 85%, se han arrastrado proyectos del sexenio anterior, pero las oportunidades están.
“Desde el 2012 a hoy no ha cambiado la matriz de interés de México, para mí es un país que ofrece una posibilidad de inversión importantísima tanto en electricidad como en gas y petróleo, entonces diría que cualquier empresa puede venir a invertir”, puntualizó.
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