Si en los años ochenta México era petrolero, está en camino a ser un país motorizado, dijo la economista de la American Chamber of Commerce México, Deborah Riner.   La Inversión Extranjera Directa (IED) en México oscilará entre 25,000 y 35,000 millones de dólares (mdd) para 2016, estimó la American Chamber of Commerce México. En 2014, los flujos de inversión fijos que entraron al país fueron por 22,568 mdd, 36% menos que en 2013, que alcanzaron hasta 35,188 mdd. En aquel año, la compañía belga AB InBev compró Grupo Modelo por 20,100 mdd. En los últimos años, la IED en el país se ha mantenido sin grandes variaciones excepto cuando una compañía internacional adquiere una mexicana, como en 2001, cuando el grupo financiero Citigroup compró Banamex por 12,500 mdd. En conferencia de prensa, Deborah Riner, economista en jefe de la American Chamber en México, dijo que las exportaciones son uno de los motores de crecimiento del país. Prueba de ello es que el 28.6% de las exportaciones provenía del segmento automotriz, dijo. “Si en los años ochenta México era petrolero, está en camino a ser un país motorizado”, agregó. Riner también se refirió acerca de las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), en las que prevé un crecimiento global lento y con menos inversiones, y dijo que México tiene mejores perspectivas que otros países. “Si no estás seguro de que tienes mercado, ¿para qué inviertes más?”, expresó Riner en conferencia de prensa.   Petróleo a 100 dólares era “anormal” Sobre el tema de los precios del petróleo, aseguró que éstos regresaron a niveles “normales”, pues de 2004 a 2010, el costo de crudo se mantuvo entre 54 y 57 dólares por barril. “Los precios de petróleo que hemos visto que en años anteriores, realmente eran lo anormal, pues estaba muy por encima de los niveles históricos”. Hacienda proyectó en sus precriterios del presupuesto 2016 un precio por barril de 55 dólares. Asimismo, dijo que las reformas estructurales del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto tardarán en reflejar su impacto. “Durante la segunda mitad del sexenio vamos a ver los frutos de las reformas en términos de una mayor tasa de crecimiento”. Los retos para el crecimiento económico de México siguen siendo, para Riner, un mercado doméstico más dinámico, creación de empleos, aumentos de sueldos reales (descontando la inflación), alza de remesas y crecimiento del crédito.  

 

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