*Por: L.A, L.C y M.F Laura Becerra Rodríguez

La misión del Banco de México es preservar el valor de la moneda nacional a lo largo del tiempo y una de las herramientas de política monetaria con las que cuenta para hacerlo es la disminución o el incremento de la tasa de referencia, aunque al hacerlo impacta en otras variables económicas, como es el caso de la inflación –donde la meta es un nivel del 3%– y el crecimiento económico. Lo ideal es que en un entorno de tasas de inflación bajas y estables, eso se traduzca en crecimiento económico que permita un mayor nivel de desarrollo y bienestar económico para el país en el futuro.

Durante la pandemia, Banxico disminuyó la tasa de interés de referencia, por lo que los créditos y el financiamiento eran muy accesibles para la población, las empresas y el gobierno; se buscó fomentar el gasto de los hogares y de las empresas para impulsar la economía que se venía desacelerando.

En lo que va del año, la inflación ha sido elevada a nivel global y continúa incrementándose –en niveles del 7,68% al cierre de abril de acuerdo con el Inegi– primero por la contingencia sanitaria y después por la invasión de Rusia a Ucrania.

El Banco Central, al tratar de detenerla, ha estado incrementando la tasa de interés, –el 12 de mayo del año en curso fue de 50 puntos base para llegar a niveles del 7%– en busca de moderar la demanda, lo que en teoría ocasionará menos presiones inflacionarias, frenará el aumento de precios y tratará de no alterar la recuperación económica.

Lee aquí a todos los columnistas de +Dinero

El incremento de la tasa de interés genera un aumento en el costo del dinero y un encarecimiento del crédito, esta situación afecta a la población que requiere de préstamos en su vida cotidiana; a las empresas por la necesidad de financiamiento para seguir operando con regularidad; y al gobierno para financiar el gasto público.

En su momento, las tasas de interés bajas de los créditos hipotecarios provocaron una mayor demanda de estos para la adquisición de viviendas, lo cual propició que se elevaran los precios; pero ahora con el incremento del costo de este tipo de créditos, se disminuirá la demanda y se esperará un ajuste en los precios.

En el caso de las empresas que regularmente financian sus proyectos de inversión, el elevado costo del dinero podría disminuir o detener este tipo de inversiones además de elevar los intereses de los créditos contratados con anterioridad, lo cual incrementará sus costos y reducirá su margen de utilidad. Esto impactará en un menor crecimiento económico, pues las empresas dejarán de crecer y la población disminuirá la demanda de créditos para consumo.

En el caso del gobierno, lo obliga a incrementar las tasas de interés a los diferentes instrumentos de deuda para conseguir financiamiento, atraer inversionistas nacionales y extranjeros, y con ello evitar que esos capitales puedan buscar mejores rendimientos en otros instrumentos de inversión o bien en mercados extranjeros.

Un aspecto rescatable es que el aumento de las tasas de interés desincentiva el consumo, pero puede favorecer a los diferentes inversionistas, proporcionando una mayor rentabilidad, es decir, con intereses mayores.

Te podría interesar esta columna de opinión también: Cómo identificar un fraude inmobiliario

En días pasados el Gobierno presentó un plan para contrarrestar la inflación que consiste en incrementar la producción de granos básicos, asimismo se acordó un pacto con los empresarios para no elevar los precios de 24 productos de la llamada “canasta básica” y la exención en el cobro de aranceles en fertilizante durante seis meses, lo cual será favorable pero sus efectos no se reflejarán de forma inmediata.

A manera de conclusión, se espera en el corto plazo una limitada recuperación de la economía, pasando por un bajo crecimiento y una alta inflación como hasta ahora, hasta lograr que la economía no tenga presiones inflacionarias en el mediano plazo. No obstante, eso estará supeditado a la continuación de las hostilidades de Rusia vs Ucrania, a la pronta solución del problema en las cadenas de suministro que ya lleva bastante tiempo y al peligro aún latente del Covid-19.

Lo más importante es que Banxico pueda encontrar el equilibrio en las decisiones de política monetaria de acuerdo a las necesidades reales del país que permita una inflación del +- 3% con un crecimiento económico constante; algo que no parece fácil pues, por ahora, depende de la situación global.

*Integrante de la Comisión de Finanzas y Sistema Financiero del Colegio de Contadores Públicos de México

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

¿Ya nos sigues en Twitter? Síguenos y recibe la información más destacada

 

Siguientes artículos

Pero si yo tenía más dinero en mi Afore, ¿a dónde se fue?
Por

Aunque tu cuenta de Afore reporta un valor en número, este no refleja lo mismo que el saldo de tu cuenta de banco. ¿Cuál...