La industria del helado en México tenía proyectado que a mediados de marzo llegaría el intenso calor que usualmente anuncia la primavera.
Las neverías sabían que justo a la mitad de este tercer mes del año abundaría por tanto el antojo de los consumidores por productos refrescantes, y que tendrían que estar listas para las elevadas ventas.
Sin embargo, esas proyecciones de mucho calor y antojo de helado, llegaron semanas antes, propiciando si bien mayores ventas anticipadas, un reto para toda nevería por evitar que la temporada se convierta en un fracaso.
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“No teníamos prevista la ola de calor que empezó desde fines de febrero, y que ha seguido en el inicio de marzo. Usualmente los primeros días de marzo eran de lluvia y todavía de frío”, comentó Beatriz Rodríguez, directora general de la cadena de neverías Frody.
El calor inusual, explicó la directiva, propició que toda la industria del helado se tuviera que anticipar en el abasto de insumos, y por tanto, hay riesgo de desabasto.
Cartón para vasos de helado, refrescos para bebidas preparadas, cremas batidas, jugos de fruta. Todo se requirió antes por todos, de acuerdo con Rodríguez.
En el caso de Frody, comentó, se realiza un esfuerzo logístico y estadístico por librar el desabasto.
De momento, Rodríguez descartó que pudiera ocurrir que los clientes de la nevería que lidera no encuentren algún producto que deseen. Y eso sí, Frody espera que el aumento en las ventas de Semana Santa de este año sea de un 30%, dejando muy atrás los incrementos de 16% a 18% que usualmente ven rumbo a esa temporada.
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