Iron Man y el Hombre Araña no sólo tienen la gracia de salvar al mundo en sus historietas y películas; también son los causantes de que Felipe y Jessica, desde muy jóvenes, se introdujeran al mundo de los cómics y que hace cuatro años decidieran probar suerte con uno propio: Kindery. A diferencia de Peter Parker, de quien Felipe tiene su casa llena de cómics, y el millonario Tony Stark, de quien Jessica dice estar cautivada, los personajes de los cuentos de esta pareja colombiana no tuvieron su origen gracias a la picadura de algún insecto ni en un laboratorio provisto de alta tecnología, sino a raíz de que se dieron cuenta que había un segmento de la población que no era atendido con este tipo de productos, los niños de cero a 5 años, quienes tienen sus primeros acercamientos con el mundo a partir de imágenes. Pero este par de emprendedores no se lanzaron a la aventura sólo por ser fans de los cómics; si bien fue un factor crucial trabajar en lo que tanto les gusta, Felipe ya tenía experiencia en el dibujo de cómics trabajando para Warner y Jessica conocía métodos de aprendizaje para niños y jóvenes. La pareja inició el proyecto en casa con una impresora, hojas blancas, lápices y una engrapadora. La primera impresión del cuento número 1 fue en blanco y negro, y lo presentaron en la Feria del Libro de Bogotá en 2012. Apenas fueron 300 ejemplares. En el segundo tiraje ya imprimieron 1,000 ejemplares con una imprenta de verdad. También puedes leer: Del cómic a la pantalla: un negocio millonario  Los propios padres de los niños les comenzaron a pedir cada vez más historias, pero Jessica y Felipe tomaron con cautela los primeros avances del proyecto e iniciaron un proceso para diagnosticar qué era lo que les gustaba a los niños y cómo podían profesionalizar su proyecto. Para ello escucharon comentarios de las madres, llevaron a cabo focus group con niños para ver cómo interpretaban cada uno de los cuentos y con quién se identificaban, se reunieron con psicólogos, con educadores y se hicieron de papers de universidades para entender mejor la etapa temprana de los humanos. A la par de esto crearon un manual en que dejaron plasmada la identidad de cada personaje y el ambiente donde se desarrollarían las historias, que es en una escuela, el segundo núcleo más importante donde los niños suelen convivir después del círculo familiar. Justo en ese momento sucedió algo en Colombia que no fue ajeno en otros países latinoamericanos: el regalo favorito de los niños en Navidad comenzaron a ser las tabletas, ese “juguete” elaborado con materiales de vidrio y metal, que años atrás parecía impensable que los propios padres se los acercaran. Esto orilló a Jessica y Felipe a trasladar parte del esfuerzo del proyecto a la plataforma digital, donde los límites de lectoría son ilimitados, sobre todo cuando Kindery está basado en un lenguaje no escrito, sino corporal, lo que ha permitido que incluso pueda ser descargado en países con diferentes idiomas. Cabe decir que en un principio el cómic llevó por nombre Escuela de Mascotas, pero los internautas lo relacionaban con colegios para niños o centros de educación para animales domésticos, por lo que tuvieron a bien cambiarle el nombre. Son nueve los personajes de Kindery y todos están basados en una teoría sobre desarrollo de personalidad; esto significa que la mayoría de los niños se identificará al menos con alguno. Cada historia tiene como objetivo trabajar temas de desarrollo emocional; por ejemplo, el respeto a las diferencia y la tolerancia. Hasta el momento, la aplicación digital ha sido descargada por más de 30,000 personas de 70 países. Las oficinas de Jessica y Felipe se alojan en la aceleradora Wayra Colombia, donde también trabajan con otros emprendedores con quienes intercambian experiencias y conocimientos. En 2014, Kindery obtuvo el Premio Colombia en Línea. Hoy busca apalancar su posicionamiento y ser patrocinado por más firmas que tengan la mirada puesta en el segmento de negocios de la generación alfa (los nacidos después de 2010). También se han dado a la tarea de producir lápices, peluches y otros productos que se vinculan a la marca. grafico_kindery

 

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