¿El área de juegos tan ruidosa en McDonald’s  dará paso  a salas de lectura calladas y formales?, acaso aquel mercadólogo que tomó la decisión de cambiar juguetes por libros, ¿tendrá hijos?     ¿Es en serio? McDonald’s cambiará los juguetes de la Cajita Feliz por ¿libros? No me malinterpreten, no estoy en contra del fomento a la lectura, todo lo contrario, de hecho yo soy un lector asiduo y me parece muy loable el esfuerzo que realiza el Consejo de la Comunicación en promover la lectura en familia, pero desde el punto de vista de mercadotecnia ¿Qué pasa con el “Equity” de la Cajita Feliz? ¿se perderá la felicidad por un mes? el área de juegos tan ruidosa y llena de cualquier elemento comestible o no de dudosa procedencia, ¿dará paso ahora a salas de lectura calladas y formales?, ¿acaso aquel mercadólogo que tomó esta decisión tendrá hijos? Porque que yo como padre de dos mini hooligans, de 3 y 7 años, veo diferencias diametrales entre ellos; el de 7 años por supuesto que ya sabe leer y también le gusta hacerlo, pero, ¿qué creen? Ya no le gusta tanto comprar la Cajita Feliz, ya hay que comprarle el Junior Pack (que por cierto no incluye juguete o libro en este caso)  y sólo pide la Cajita Feliz siempre y cuando el juguete valga la pena conforme sus estándares propios de un niño de 7 años, además una porción adicional de nuggets ya que la porción original de la cajita ya no es suficiente para su “delicado estomaguito en desarrollo”. Y por el otro lado, justo el consumidor objetivo de 3 años ¡aún no sabe leer! ¿Cómo le explico que no hay juguete y se lo cambio por un lindo libro que no entiende? O ¿Cómo yo como padre me voy a sentar a leerle en un restaurante lleno de distractores? ¿Será que esta decisión obedece a otras oscuras intenciones? Veamos ¿quién podría salir más beneficiado de esto? El impresor que está haciendo el negocio de su vida, ya que en la primera fase de febrero se imprimieron 700,000 ejemplares y para la segunda ola de noviembre están planeados otro tanto igual para sumar 1.4 millones de ejemplares en un año a ser repartidos en mas de 400 restaurantes a nivel nacional, con esto por cierto, McDonald’s se ubicará entonces como el mayor distribuidor de libros a nivel nacional (Lo siento Ghandi, Porrúa, Pearson, Cengage y demás empresas dedicadas a la distribución seria de libros) o ¿Será Editorial Planeta quien tiene los derechos de los títulos emitidos de los Hermanos Grimm que estarán disponibles quien mas se beneficia? Eso nunca lo sabremos. Lo único cierto es que a veces, como en este caso, hay estrategias que no contribuyen al fortalecimiento de la marca y no se conoce o no se toman en consideración el contexto de la experiencia del consumidor. Ya que el juguete de McDonald’s acompaña al niño dentro del mismo restaurante y tiene una vida útil muy corta y ahora el libro está por demás decirlo que es imposible usarlo dentro del McDonald’s y la vida útil del mismo tengo mis serias dudas que supere a las del juguete en sí, ya que si logra sobrevivir a los derrames de refresco y manchas de salsa cátsup, es un formato pequeño para un adulto y el niño actual tiende a valorar mas lo digitalizado incluido los libros, donde se puede interactuar con muchos de ellos. Si en su afán ético se trataba de fomentar la lectura ¿no hubiera sido mejor que McDonald’s desarrollara un app para celulares con el mismo contenido pero de manera interactiva? Ya que el uso de celulares y sobre todo los denominados inteligentes, ha roto barreras en México tanto de nivel socioeconómico como de género. Ojalá me equivoque con mis apreciaciones y nada me daría más gusto que McDonald’s haga un anuncio que sus Cajitas Felices rompieron record de ventas por tan original idea de cambiar juguetes por libros, sin embargo, lo dudo mucho, mejor tratemos de entender el contexto y experiencias de uso y consumo de nuestras marcas, antes de introducir innovaciones sin sentido ya que esto aplica para muchas categorías e industrias que dentro de su originalidad ignoran o rompen intencionalmente el halo de fortaleza alrededor de la marca y su relación con el cliente denominado “Equity de marca” o acaso ¿Alguien extraña a la Crystal Pepsi?.   Contacto Twitter @CesarEnriquez   *Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

Michoacán: de los adjetivos a los hechos
Por

Decir que Michoacán se está ‘balcanizando’ es reducir la explicación del conflicto de violencia que se vive en ese estad...