La mujer detrás de la estrategia de Sico en México

Según datos de la OCDE, México ocupa el primer lugar mundial en embarazo entre adolescentes. Anne Engerant, directora general de Reckitt Benckinser (RB) México, quiere crear consciencia sobre este tema en la sociedad mexicana. La compañía que comanda es un conglomerado de empresas que abarca distintas marcas, entre ellas los condones Sico. Engerant dijo a Forbes México que su misión no es ser la marca de condones que más se compre en México, sino que pretende crear consciencia sobre el ejercicio responsable de la sexualidad. Cada día, alrededor de 1,095 niñas quedan embarazadas en el país. Esto, además de suponer un problema de embarazo adolescente, provoca que las niñas pierdan la oportunidad de seguir estudiando, pues deben hacerse cargo de sus bebés cuando nacen. Este problema atiende principalmente a dos factores: el primero es la propia sociedad mexicana que continúa siendo machista, la directora general de RB en nuestro país afirma que muchas de las niñas no usan protección porque no tienen el valor de obligar a su pareja a ponerse un condón a la hora de tener relaciones sexuales. El 55% de los jóvenes adolescentes mexicanos reconoce no haber usado protección en su primera vez. Para Anne Engerant es importante que los jóvenes entiendan que el uso del condón es una muestra de respeto hacia su pareja porque, además de prevenir embarazos, reduce la posibilidad de contraer alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS). El segundo factor por el que una de cada dos mujeres entre 12 y 19 años que comienzan a tener relaciones queda embarazada es la falta de una educación sexual, pues el tema sigue siendo tabú. Engerant afirma que es necesario que la compra de profilácticos sea más sencilla, pese a la gran cantidad de marcas existentes, muchos jóvenes no pueden adquirirlos porque los encargados de la venta al ser menores de edad les solicitan que sus tutores los acompañen.  Esto les genera vergüenza y optan por tener relaciones sin protección. Además, para fortalecer la educación sexual, los mayores tenemos, según Anne Engerant, la obligación de no rehuir a responder preguntas obvias sobre estos temas para ayudar a los jóvenes a tener las herramientas necesarias ya que en nuestro país la actividad sexual comienza a muy temprana edad. “Lo que Sico pretende es liberar a los jóvenes y empoderarlos para que puedan tener una actividad sexual sana y ayudarles a prevenir los embarazos”, concluye.