Por Dayham Gerardi* La obtención de una certificación tiene un impacto positivo inmediato en la imagen y confianza que proyecta una compañía tras adoptar un modelo que cumple con los estándares más exigentes de calidad, transparencia y sostenibilidad. En el caso específico de una certificación especialmente diseñada para los departamentos de compras, este impacto se ve reflejado tanto al interior de la organización –al mejorar la posición del área de compras–, como en su mercado de referencia, resultando especialmente relevante en la articulación de la relación con proveedores. En la actualidad, la función de un departamento de compras ya no se limita solo a generar ahorros. Su actividad también se focaliza en la gestión, competitividad e imagen de la empresa, ya que el mercado enfrenta un escenario internacional con un mayor número de actores y múltiples riesgos en la adquisición de materiales, artículos y servicios. Es por ello que hace sentido que las empresas mexicanas consideren alinearse a la Norma UNE 15896 Gestión de Compras de Valor Añadido, el primer estándar supranacional en el ámbito de las compras, avalado por el apoyo de las asociaciones europeas de compras y asumida por la Federación Mundial de Compras (IFPSM, por sus siglas en inglés) como normativa propia. Asimismo, es la primera normativa de compras cuyo objetivo es unificar los procedimientos de trabajo y otorgar criterios de actuación para guiar a los responsables del área de compras hacia una óptima gestión. La norma es aplicable a organizaciones de cualquier tamaño y sector a nivel mundial, ayudándoles a obtener una ventaja competitiva y diferenciarse en su mercado. Las empresas que cuentan con la certificación UNE 15896 ganan efectividad, eficiencia y comunicación en temas como gestión de compras y aprovisionamientos; proveeduría global; planificación de compras; identificación, evaluación y selección de proveedores; compras y responsabilidad social; administración de almacenes, inventarios y logística; marcos legales de contratos; procesos de negociación y mejora continua. Por los beneficios que ofrecen sus metodologías, en México son ya varias las empresas de sectores de la construcción, alimentos y bebidas, energía, entre otras, que operan bajo esta norma, ya sea de manera directa o indirecta a través de las plataformas que contratan para compra de indirectos. Las compañías que consideren apegarse a UNE 15896 pueden acercarse a empresas que prestan el servicio de asesoramiento experto para la obtención de esta certificación, o contratar plataformas de compra que ya operan bajo esta con el fin de acceder de inmediato a las mejores prácticas en compras. *Director general de Fullstep México.   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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