Herederos de los fundadores de Grupo Bimbo, los hermanos Luis y Miguel Jorba Servitje han sido parte del legado corporativo que ha llevado a la empresa a dominar los mercados de panificación en los que participa.
Este año, la familia Jorba Servitje ocupa la posición 28 de las mayores fortunas del país de acuerdo con el ranking Multimillonarios 2020 de Forbes México con 820 millones de dólares (mdd), esto es una baja de 25.45% respecto de los 1,100 mdd registrados en 2019.
Para Grupo Bimbo, que como parte del entorno esencial de la economía no se ve forzada a parar actividades por la emergencia sanitaria del coronavirus, el reto pudiera venir de otras partes, en donde se toman otras decisiones.
Por ejemplo, para lo que hemos visto este año, el desafío más grande llegó por su planta en Wuhan, China, justo el epicentro de la pandemia que tiene en vilo al mundo, pues no se conoce aún cuál será su impacto en la salud y en la economía global y de los países.
En su más reciente reporte al fin de la primera quincena de abril de este año, el Fondo Monetario Internacional hablaba de un impacto 30 veces mayor a la recesión de 1939, con pérdidas de hasta 6.6% en el producto interno bruto de México.
Esto puede servir de termómetro para lo que las empresas de todo tamaño en México y el mundo deberán de afrontar.
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De acuerdo con analistas, las operaciones de Bimbo en todo China representan menos de 1% de sus ventas totales y flujo operativo, de modo que el impacto es marginal. No obstante, el paro de esa planta y el hecho de que la pandemia haya tocado otros mercados hacen vaticinar un primer trimestre débil.
Se estima que, al final de ese periodo, se dispondrá de mayores detalles sobre el impacto de la enfermedad a escala global. Pero esa situación afectará a todas las empresas y, al margen de ello, Bimbo se comprometió a invertir, este año, entre 700 y 800 mdd.
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