Quizá podríamos llamar al sexenio que está por terminar el de las telecomunicaciones, ya que este segmento no sólo mantuvo un crecimiento constante que promovió la adopción de las tecnologías de información y comunicación por parte de una cantidad significativa de usuarios, en adición, el índice de precios se mantuvo por debajo de la inflación. De acuerdo con el anuario estadístico 2018 publicado por el Instituto Federal de Telecomunicaciones, el índice de precios en telecomunicaciones no sólo no ha crecido, en contraste ha presentado un decremento sustantivo en sus precios y un aumento en la oferta de servicios. En otras palabras, se paga menos por más servicios. Particularmente, los precios que más han bajado son los de telefonía fija y larga distancia nacional, pues a partir de 2015 que entró en vigor la eliminación de los costes por dicho servicio, se han mantenido estables, a la par de los de la telefonía celular que, prácticamente desde mediados de 2016 no han mostrado incrementos significativos. En el mismo tenor se mantiene la telefonía fija y los servicios de proveeduría de Internet. En este sentido, el único servicio que ha visto un incremento en sus precios es la televisión restringida. Los indicadores se muestran optimistas. En México, existen poco más de 115 millones de teléfonos celulares, que equivalen a 92 líneas por cada 100 habitantes, un aumento de casi 5 puntos respecto del periodo anterior (88.5). Respecto al acceso a banda ancha móvil, la media nacional se encuentra en 65 por cada 100 habitantes, número que se encuentra muy por debajo de los 95, que corresponde al promedio de países miembros de la OCDE. Sin embargo, el crecimiento y acceso a Internet y a los servicios de telefonía móvil no es homogéneo en la República, puesto que existen diferencias muy notables. Por ejemplo, los estados con la mayor cantidad de líneas celulares por cada 100 habitantes son Sonora (116), Baja California (110), la Ciudad de México (109), Baja California Sur (108), Sinaloa (103), Nuevo León (102) y Jalisco (101). Por el lado opuesto, Chiapas es el estado con los indicadores más bajos, ya que tiene 65 líneas de celular por cada 100 habitantes. Oaxaca tiene 70 y Guerrero 72. Respecto al acceso a banda ancha móvil, la CDMX comparte con Sonora el mayor número de usuarios conectados con 91 por cada 100 habitantes. Le siguen BCS (86), Quintana Roo (83), BC (82) y Yucatán (82). De nuevo, en los últimos lugares se encuentran Chiapas (33), Oaxaca (42) y Guerrero (46). Y con respecto a la conectividad fija a Internet, la media nacional indica que 51 de cada 100 hogares tienen acceso a Internet. En la capital del país, el acceso es 96 por cada 100, que representa la más alta del país. Le siguen Nuevo León (76), Querétaro (72), Baja California (70) y Jalisco (63). Chiapas (17), Oaxaca (22) y Tabasco (23) se encuentran en los últimos lugares. El sexenio siguiente tendrá que mantener una estrategia que permita crecer a los estados que se encuentran rezagados al menos al promedio de la media nacional, puesto que además son los que presentan los mayores indicadores de pobreza y bajo rendimiento escolar. Lo siguiente, entonces, sería seguir creciendo para alcanzar los niveles de la OCDE y cerrar la brecha digital para tener más y mejor competitividad.   Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @sincreatividad Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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