En una de las explanadas de sus oficinas centrales, ubicadas en el Centro Histórico de la Ciudad de México, el Metro construye un proyecto de renovación eléctrica para el cual pagará 4,500 millones de pesos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), con el objetivo de mitigar los riesgos de interrupciones del servicio del Sistema de Transporte Colectivo por eventuales fallas en el suministro eléctrico y reducir su factura de consumo de electricidad.
De acuerdo con el director de CFE Distribución, Guillermo Nevárez Elizondo, al año el Metro tiene una factura de consumo de electricidad que asciende a los 1,900 millones de pesos. Con el proyecto de modernización del suministro eléctrico para las líneas 1, 2 y 3 –que conforman la columna vertebral del sistema– se estima un ahorro de 13% en el consumo de electricidad, según el directivo de CFE, lo que se traduciría en cerca de 250 millones de pesos menos en la factura.
El proyecto está a cargo de la CFE por instrucción de la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien públicamente ha respaldado el discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre fortalecer a esta empresa estatal. Incluso, por esa misma razón su gobierno decidió que la planta solar que se construye en la Central de Abasto de la capital quede bajo la operación de la Comisión Federal de Electricidad.
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Durante un recorrido de supervisión por los trabajos que se realizan en Delicias, donde el 9 de enero de 2021 se incendió la Subestación Eléctrica de Alta Tensión Buen Tono con un saldo de una mujer policía muerta y la pérdida total del edificio del Puesto Central de Control I, el director del Metro, Guillermo Calderón, destacó que la nueva subestación eléctrica tendrá una potencia de 240 megawatts, con lo que se podría abastecer una ciudad como Villahermosa, Tabasco.
El proyecto denominado Metro-Energía incluye la fabricación y puesta en operación de equipos de protección, control, medición y cableado, 74 interruptores, 18 cuchillas de amarre, cuatro interruptores de banco y cuatro transformadores de alta gama con potencia de 60 MVA. Los transformadores y la propia subestación eléctrica encapsulada en hexafluoruro de azufre estarán dentro un edificio independiente, para evitar accidentes como el de 2021.
La nueva subestación que dotará de electricidad a las líneas 1, 2 y 3 implica la fabricación de más de 130,000 kilómetros de cable. 27,000 metros de cable de potencia para 230 KV calibre 1,000 y 111,000 metros de cable de mediana tensión de 15 KV. La puesta en servicio de esta nueva infraestructura está pensada para el 18 de agosto próximo.
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No obstante, a finales de este año iniciará la tercera fase del proyecto, que consiste en la sustitución de cerca de 40 subestaciones de rectificación de la Línea 1 del Metro, como parte de su modernización integral, que incluye la sustitución de todos los sistemas eléctricos, electrónicos y de vías, así como la renovación de todos los trenes.
A decir de la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, estos y otros proyectos como la renovación integral de la Línea A, la conclusión de la extensión de la Línea 12 de Mixcoac a Observatorio y la rehabilitación del tramo accidentado en 2021, la construcción del nuevo Puesto Central de Control, entre otros proyectos suman una inversión histórica de más de 45,000 millones de pesos aunados al presupuesto ordinario que tiene el STC para su operación y mantenimiento.
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