México libra el efecto Brexit: crecerá 2.5% en 2016
México crecerá a un ritmo de 2.5% en 2016. El Fondo Monetario Internacional realizó una subida marginal con respecto a su previsión de abril.
De manera imprevista, la decisión de Reino Unido de salir de la Unión Europea se convirtió en la materialización de un riesgo central para la economía global.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ajustó su pronóstico de crecimiento a la baja en el plano global; sin embargo, para el caso de México el ajuste se dio en una décima de punto porcentual al alza, debido principalmente a que la previsión de Estados Unidos no se deterioró. Incluso, antes de anunciarse el Brexit, el organismo consideraba ajustar al alza la previsión para algunos emergentes, como Brasil y Rusia.
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Al final del día, el crecimiento de la economía mexicana esperado para el cierre de 2016 es de 2.5%, mientras que para 2017 se prevé un avance de 2.6%.
En su informe de abril, el organismo señala que el crecimiento de México está respaldado por una vigorosa demanda interna privada y los efectos derrame derivados de la fortaleza económica de Estados Unidos.
“El desempeño deficiente de la producción industrial estadounidense —más relevante para México que para el sector de servicios en Estados Unidos— ha aumentado los riesgos a la baja para el crecimiento”, advirtió en su momento.
Para el FMI, la depreciación del peso y el abaratamiento de los precios de la electricidad deberían impulsar las exportaciones y la producción manufacturera. La inflación no se contemplaba entonces como un factor de riesgo, pues cayó drásticamente en 2015 a pesar de la fuerte depreciación, en parte debido a factores excepcionales (por ejemplo, la reforma de las telecomunicaciones y efectos de base relacionados a cambios impositivos).
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“La caída de los precios del petróleo sólo tendrá un efecto limitado en las finanzas públicas en 2016, dado que el riesgo relacionado con dichos precios ya cuenta con la debida cobertura para este año. Sin embargo, si el shock de precios del petróleo persiste, aumentaría la carga de la consolidación fiscal a mediano plazo”, señala el organismo.
