EFE.- El Gobierno danés anunció este miércoles el cierre de centros comerciales y tiendas no esenciales en navidades por la segunda ola de coronavirus, lo que unido al parón parcial de la vida pública supondrá en la práctica una paralización de la actividad económica.
Los centros comerciales cerrarán desde este jueves; las escuelas (ya clausuradas parcialmente) estarán cerradas para todos los cursos desde el lunes, al igual que peluquerías y fisioterapeutas, mientras que a partir de Navidad y hasta el 3 de enero solo supermercados y farmacias estarán abiertos.
Desde hace una semana ya regía en parte del país el cierre –que se fue extendiendo al resto– de escuelas a partir de quinto grado, institutos y universidades; de los bares y restaurantes y de la vida cultural y deportiva, incluyendo teatros, cines, gimnasios e instalaciones, salvo para deporte profesional.
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“La situación es muy grave, existe transmisión comunitaria en todo el país y la sanidad está bajo presión“, dijo la primera ministra, la socialdemócrata Mette Frederiksen, en una rueda de prensa en la que se anunciaron nuevas medidas de ayuda a los sectores afectados.
Frederiksen descartó sin embargo una reducción mayor del límite de diez personas para las reuniones públicas o medidas de confinamiento de la población, que ningún país nórdico ha aplicado por el momento.
Récord de nuevos casos y aumento acusado de hospitalizaciones
Dinamarca registró en las últimas 24 horas 3,692 nuevos casos de coronavirus, un récord diario para uno de los países que más pruebas hace en proporción: casi 700,000 la última semana para una población de 5.7 millones.
La cifra de ingresos hospitalarios se situó en 493, la mayor desde el 1 de abril, y se registraron 14 muertos para alcanzar un total de 975, algo que no ocurría desde principios de mayo.
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Las cinco regiones en que se divide el país han declarado el segundo nivel más alto de alerta sanitaria y en algunas como la de Copenhague se han aplazado varias semanas las operaciones y tratamientos no urgentes.
Las autoridades sanitarias cuentan con que la cifra de ingresos suba aún más los próximos días y que se llegue al nivel de la pasada primavera, mientras Frederiksen alertó de que enero y febrero pueden ser los “peores” meses en lo que llevamos de pandemia.
Con una tasa de mortalidad de 16.58 por 100,000 habitantes, Dinamarca se sitúa entre los países europeos con menos fallecidos. Son el doble que Noruega y Finlandia, pero cinco veces menos que Suecia, el más afectado entre los Nórdicos.
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