La emergencia sanitaria por el coronavirus está paralizando buena parte de la economía y sobre todo las decisiones económicas a largo plazo o de alto costo, en especial para el sector de bienes raíces, como buscar una oficina más amplia o una casa de mayor tamaño. Sin embargo, este periodo también abrirá una oportunidad para los inversionistas que cuenten con capital disponible, pues los precios venta como las condiciones de arrendamiento ofrecerán muchas facilidades, consideró el director general adjunto de JLL, Héctor Klerian. “El único factor bueno en este momento es que hay grandes oportunidades de arrendamiento. Hoy sí, si eres un inquilino buscando un requerimiento grande de oficinas, básicamente puedes tú poner las condiciones porque los propietarios están muy ávidos de encontrar un inquilino bueno, con condiciones a largo plazo. Hoy puede lograr unas condiciones espectaculares en contrato de arrendamiento”, explicó.

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En el reporte Covid-19: Implicaciones globales en bienes raíces, elaborado por la consultora, se menciona que en el caso de las oficinas y los espacios de coworking, los contratos de corto plazo estarán muy comprometidos ante los impactos de la crisis. TAMBIÉN LEE: Cofece pide a Desarrolladores Inmobiliarios evitar prácticas monopólicas en contingencia “En mercados más afectados, los dueños de inmuebles que se encuentren en negociaciones con los arrendatarios mostrarán mayor disposición de acelerar las pláticas y posiblemente ofrezcan paquetes con mayores concesiones para cerrar las operaciones. Con las circunstancias actuales, los propietarios asesorados para ceder en pequeños puntos de la negociación de la renta para asegurar que los acuerdos se concreten pero se conserve el Ingreso Neto Operativo (NOI)”, acota el documento. Si bien, hay sectores como el hotelero y turístico que también resentirán fuertemente las consecuencias de la pandemia por la caída de ingresos, otros como los inmuebles para industria y logística tendrán un margen para negociación, pues se prevé que la reactivación de su producción sea más ágil, sobre todo ante la demanda de insumos de distintos sectores. Igualmente, sus contratos por periodos de 3 o hasta 5 años establecen un lazo de más largo plazo entre arrendador y arrendatario, lo que da mayor margen para diferir algunos cobros o dar mayores facilidades de pago, refirió el especialista. Y aunque en algunos desarrollos, la contingencia puede representar un periodo de parálisis, la consultora estima que para el segundo semestre del año se dé una reactivación del sector bienes raíces. “Va a haber un repunte en el segundo semestre, por eso que te digo, va a haber negocios que se recuperen más rápido que otros, y esa gente va a buscar oportunidades”, explicó Klerian. Aunado a ello, celebró que en la capital del país, las autoridades locales presentaran a mediados de marzo la ventanilla única para trámites de construcción, con lo que se anticipa puedan aumentar las oportunidades. Pero cuando pase la contingencia. “Lo malo es que esa facilitación llegó en un momento donde hubo una incertidumbre relevante en cuanto a temas económicos y de continuidad de negocio por la enfermedad”, aseguró.

 

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