DW.- La crisis sanitaria mundial ha provocado la pérdida de millones de empleos y ha puesto contra las cuerdas a centenares de empresas en una región que tiene alta dependencia del sector turístico.

Playas de ensueño, diversidad de paisajes y culturas, gastronomía y el calor de sus gentes, son algunos de los atractivos de América Latina y el Caribe que mueven a millones de personas al año a descubrir sus encantos.

Según el Informe de Impacto Económico del Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), “en 2019, el sector de viajes y turismo generó 16.9 millones de empleos, es decir, 7.9 por ciento de la fuerza laboral total de Latinoamérica”.

“También contribuyó con 298 mil millones de dólares del producto interior bruto (PIB), lo que representó 8,1 por ciento para la economía en la región, un crecimiento de 1,6 por ciento respecto a 2018”, dijo a DW Gloria Guevara, presidenta de este foro para la industria del viaje y del turismo.

“En el Caribe, la actividad generó 2,8 millones de empleos, es decir, 15,2 por ciento de la fuerza laboral. Además, aportó 58 mil millones de dólares, lo que representa un 13,9 por ciento de la economía de la región”, agregó la que también fue Secretaria de Turismo de México de 2010 a 2012.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

No obstante, el coronavirus ha sacudido el sector. “Se han perdido 5 millones de empleos en México, 4,5 millones en Brasil, casi un millón en Argentina y casi 700.000 en Colombia”, agregó Maribel Rodríguez, vicepresidenta de dicha organización. Además del fuerte peso de este sector, otros factores han agravado la situación.

“Ha habido una gran cuarentena, algunos países han sobrepasado los cuatro meses, con lo cual el bloqueo ha sido mayor y se ha tardado muchísimo tiempo en que haya vuelos internos, no solamente internacionales”, consideró.

El duro golpe de la cancelación de vuelos El turismo internacional es clave para algunos países centroamericanos, como Costa Rica. “Manejamos una cifra de 3.100.000 turistas, de los cuales un 75 por ciento son de Estados Unidos”, dijo a DW Fernando Madrigal, Presidente de la Cámara de Ecoturismo y Turismo Sostenible de Costa Rica (CANAECO).

“Unas 650.000 personas dependen del turismo, que representa el 8 por ciento del PIB del país”, explicó. No obstante, el cierre de aeropuertos provocó “pérdidas de alrededor de 2.500 millones de dólares para esta temporada”, detalló.

Sigue la información sobre la economía y los negocios en Forbes México

“En un solo día perdí 23.000 dólares en reservas”, dijo a DW Pippa Kelly, directora de Casitas Tenorio, que estima pérdidas económicas para su negocio de entre 80.000 y 150.000 dólares. “Antes de la pandemia, tuvimos un nivel de ocupación de 90 por ciento”, no obstante, con un 98 por ciento de clientes internacionales, “perdimos todas las reservas para marzo, abril y mayo”.

“Teníamos la esperanza de recuperarnos para junio o julio, pero no fue así y ahora se están cancelando las reservas de noviembre y diciembre”, lamentó Kelly, que también es propietaria de este alojamiento situado a unos 10 kilómetros del Parque Nacional Volcán Tenorio.

“Estamos ubicados en una zona rural dependiente del turismo, la gente se está quedando sin dinero”, relató. En su caso, “estamos sembrando nuestra propia comida, matando vacas para sobrevivir y haciendo intercambios con los vecinos”, detalló. Igualmente, “vamos a tratar de abrir los fines de semana en octubre” para turistas nacionales, un público que normalmente representa el 14 por ciento del turismo en Costa Rica.

“Ahora es el 100 por ciento, pero el turismo nacional no es suficiente para sostener las operaciones”, reconoció Madrigal. Rumbo a la recuperación El Consejo Mundial del Viaje y el Turismo realizó una serie de análisis y determinó que “el tiempo de recuperación promedio para el número de visitantes a un destino fue de 19,4 meses”, apuntó Guevara.

No obstante, “con la respuesta y el manejo adecuados podrían recuperarse en tan solo 10 meses”, agregó. Para reactivar la actividad del sector, la organización ha puesto en marcha un distintivo que identifica las destinaciones seguras para viajar.

La iniciativa cuenta con más de un centenar de destinos, entre los que se encuentran, además de Costa Rica, “muchas regiones de México, algunos lugares de Brasil, Colombia, algunas municipalidades de Ecuador, Panamá, Perú y Paraguay. Estamos trabajando con países como Argentina, Guatemala y Honduras para que lo tengan”, detalló a DW Rodríguez.

Asimismo, el foro aboga por la eliminación de cuarentenas, el seguimiento de casos y realización de pruebas rápidas “entre ciudades importantes de diferentes corredores económicos a nivel global, por ejemplo, entre Bogotá y Miami, y entre ciudades importantes de Latinoamérica, con el objetivo de reactivar el turismo de negocios”, puntualizó Guevara.

Madrigal estimó, en tanto, que la apertura definitiva en Costa Rica se hará en enero del próximo año. “Vamos a tardar dos años a recuperar la tasa de los 3 millones de turistas”, adelantó. Sin embargo, arrojó un rayo de luz.

La gente ha durado mucho tiempo encerrada en sus casas y lo que quiere es ver naturaleza. Somos un país que va a salir adelante por su sostenibilidad”, aseguró.

Sigue la información sobre la economía y los negocios del Sudamérica en Forbes Colombia

 

Siguientes artículos

La industria de los cosméticos y belleza busca crecer sus ventas en línea
Por

Las fabricantes de cosméticos y artículos de belleza buscan incrementar sus ventas por medio de sus sitios y estrategias...