Aunque en los últimos años la participación de los vehículos eléctricos e híbridos ha crecido en México, el mercado aún es incipiente, pues estas tecnologías solo representan 0.35% del parque vehicular ligero en circulación.

La transición hacia la electromovilidad en el mundo ya está en marcha, por lo tanto, es urgente que México se sume a la lista de países con compromisos y políticas públicas integrales que la promuevan, consideró la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

Fausto Cuevas, director general de la AMIA, señaló que en principio, la atracción de inversiones y nuevos proyectos productivos de electromovilidad requieren de un ecosistema que asegure el abasto de energías limpias a costos competitivos a lo largo de la cadena de valor automotriz que ya se encuentra establecida en el país.

Pero hay cuatro elementos indispensables que se deben atender para lograr la transición hacia la movilidad eléctrica: el marco jurídico, la infraestructura, incentivos y educación al consumidor, indicó hace unos días en un foro de electromovilidad de la Secretaría de Economía.

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El marco jurídico

En la AMIA se han identificamos seis leyes que pueden tener relevancia para que la electromovilidad tenga fundamentos en alguna disposición legal, estas son: la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, Ley General de Cambio Climático, Ley de Caminos, Puentes y Autotransporte Federal, Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, Ley de Transición Energética y la iniciativa de Ley General de Seguridad Vial y Movilidad.

Cuevas destacó que se requiere claridad en cuanto a la participación de los gobiernos y de la población.

Infraestructura

Actualmente la red de estaciones de recarga es insuficiente, pues únicamente existen 1,500 en todo el país, se necesita dar la confianza a los propietarios de vehículos híbridos enchufables y eléctricos de que pueden recorrer largas distancias sin tener la preocupación de una descarga completa de sus baterías y sin tener dónde recargar.

De las 1,500 estaciones que se tienen, 50% se concentran en la Ciudad de México, Nuevo León, Jalisco y Estado de México, de estas 70% son públicas y 30% privadas.

“Buena parte de estas ha sido por esfuerzo propio de la industria, de las empresas que han venido ofreciendo vehículos con estas tecnologías en los años recientes”, recalcó Fausto Cuevas.

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Incentivos

Se reconoce que a la fecha existen varios incentivos para los vehículos eléctricos e híbridos, pero la AMIA considera que para tener una mayor participación de estas unidades debe haber más apoyos para los potenciales consumidores, tales como deducibilidad inmediata al 100% de para personas físicas y morales, descuentos en los intereses por la compra a crédito, bonos o créditos fiscales para quienes inviertan en flotillas con estas tecnologías y la aplicación de tasa de 0% del IVA para la compra de estas unidades.

El director general de la AMIA indicó que también hay incentivos no fiscales que pueden promover la electromovilidad, como dar acceso a aquellas unidades con placas verdes a carriles confinados, exentarlos del pago de las cuotas de peaje en carreteras federales y en vialidades urbanas, conceder el estacionamiento gratuito en donde haya zonas de parquímetro, así como programas específicos de renovación de flotas del gobierno en los tres niveles para vehículos eléctricos y/o híbridos.

Educación al consumidor

Es importante que quienes estén pensando en adquirir este tipo de de unidades sientan la seguridad y los beneficios que esto proporciona a la economía en su conjunto, apuntó Cuevas.

¿Cuáles son los beneficios que ya existen?

Descuento de 20% en vialidades urbanas de peaje, tarifas reducidas o preferenciales para la recarga de vehículos eléctricos en domicilio, la facilidad que da la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para la instalación de un segundo medidor para los propietarios de este tipo de unidades, la exención del Impuesto sobre Automóviles Nuevos (ISAN), del pago del impuesto de tenencia y de la verificación, así como la deducibilidad de hasta 250,000 pesos para personas morales.

Actualmente las tecnologías de vehículos híbridos, híbridos enchufables y eléctricos en México tienen una participación 4.6% dentro del total de las ventas de autos nuevos.

Los que tienen la mayor participación en estas ventas son los híbridos con 93%, mientras que los híbridos enchufables y los eléctricos representan 5% y 2%, respectivamente.

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