Por Enrique Torres Desde Dinamar­ca llegaron a Nicaragua a finales de 2007. La empresa Ingemann fue instalada para producir miel en una de las 178 zonas francas que hay en este país, pues les permite exportar a la Unión Europea a un precio competitivo por contar con un régimen especial arancelario libre de impuestos. “Aunque tenemos 70% de parti­cipación del mercado en Nicaragua, apenas producimos unas 500 toneladas de miel en 2014, pero crece­mos considerablemente cada año. Ahora también producimos unas 100 toneladas de cacao de manera anual, también para Europa”, re­fiere Lars Saquero Moller, gerente general de Ingemann. España y Alemania son los principales destinos de exportación para esta pequeña empresa que ha invertido poco más de un millón de dólares y que trabaja con 700 apicultores y agricultores locales. “El procesamiento del cacao está incluido también en el régimen de Zona Franca, además de que aprovechamos los acuerdos de libre comercio que tiene el país con Europa, México y Chile, que nos permite exportar a precios compe­titivos”, señala el empresario. Las zonas francas tienen un importante peso en la economía del país. Las exportaciones suman poco más de 2,600 mdd y cerca de los 3,600 mdd en exportaciones tradi­cionales que se registraron en 2014, según información de la Cámara Nicaragüense de Zonas Francas Privadas (FCNZFP). Empresas dedicadas a la maquila textil, a la producción automotriz, tabaco y oficinas dedicadas al servicio de call centers, aprovechan las facilidades comerciales de las zonas francas, y son parte de las cifras del crecimiento económico que presenta Nicaragua en los últimos años, pues les permite captar inver­sión extranjera directa y generar empleos. “El concepto de zonas francas de exportación está enmarcado dentro de los planes económicos del gobier­no, especialmente por lo que hace a la política de promoción de exporta­ciones e inversiones”, refiere Javier Chamorro, director ejecutivo de Pro Nicaragua, entidad de gobierno dedicada a promover al país en el extranjero. Aunque este año ha tenido una contracción, las zonas francas reportan la generación de más de 100,000 empleos y un crecimiento de al menos 5% en las cifras de exportación en 2015, según Mario Zelaya, presidente de la FCNZFP. Esta política de reactivación del régimen de zona franca ha llevado a incrementar las exportaciones del país, que apenas llegaban a 300 mdd en 2006, y han dado paso a una nueva dinámica entre las firmas de la industria expor­tadora, un sector que participa de manera activa en las acciones que se implementan en Nicaragua desde hace nueve años. Esas iniciativas han generado que el PIB se mantenga en un ritmo promedio anual de 4.5% de creci­miento desde 2013. grafico_inversion_nicaragua_1 La apertura va El modelo económico de Nicara­gua cambió desde 2007, cuando un grupo de empresarios locales aprovechó la coyuntura nacional de cambio de gobierno para presentar un esquema de mayor participación en las iniciativas de ley. Desde entonces quedó estable­cido en la Constitución el modelo: Diálogo y Consenso, que fue incluido en la Ley de Cámaras y Comercios, donde es una obliga­ción del gobierno en turno sentar­se con representantes del sector privado a definir las estrategias a seguir en el modelo económico. “No tenemos ningún diputa­do entre los 92 que componen la Asamblea Nacional, pero cada decisión en torno al modelo econó­mico del país debe ser consultada y aprobada en común por el sector empresarial y los representantes del gobierno en turno”, comenta José Adán Aguerri, presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP). La apertura gubernamental a los empresarios les ha funcionado, pues de los 2,468 mdd que regis­traban en exportación en 2007 pasaron a más de 5,143 al cierre de 2014 y más aún, pues de los 250 mdd que captaban en inversión ex­tranjera en 2004, registraron 1,147 mdd. “Pasamos de ser el país con el mayor indicador de inversión al PIB de Centroamérica de 11 a 22%”, señala el general Álvaro Baltoda­no, delegado presidencial para las inversiones en ese país, un cargo de ministro. En 2007, solamente había 22 paí­ses con inversión extranjera directa en Nicaragua. Ahora suman 40, entre ellos México, que se ubica como el segundo exportador debajo de Estados Unidos y antes que Panamá, según cifras de ProNicaragua. “La participación del sector em­presarial en las políticas públicas es una garantía a la inversión extranjera”, afirma el general Baltodano. Nicaragua viene de ser la econo­mía más pobre de Centroamérica después de Haití, según el Banco Mundial, país sumido en la crisis por sus constantes guerrillas. El actual mandatario, Daniel Ortega, de 68 años, fue un guerrille­ro que luchó contra el régimen de Anastasio Somoza en los 80, para después postularse para presidente en 1985 y gobernar Nicaragua hasta 1990. En 2007 volvió a ganar la elección presidencial y fue cuando inició una política de apertura a la inversión extranjera como una medida para levantar la economía del país. Como resultado, Nicaragua en los últimos cinco años pasó de 3.2 a 4.7% de crecimiento del Producto Interno Bruto y es la nación des­pués de Panamá que más crece en Centroamérica. grafico_inversion_nicaragua_2 Un motor económico “El turismo va en aumento y cada vez se construyen más hoteles y oficinas”, dice Ángeles Blandino, de 26 años, una comerciante de arte­sanía de madera que tiene su local en un mercado de grandes paredes de piedra ubicado en Masaya, uno de los lugares más representativos de Nicaragua, pues fue una fortaleza en los tiempos de la guerrilla en la década de los 70. Hasta agosto de 2015, Nicaragua había recibido 917,000 turistas, 4.3% más respecto al mismo periodo de 2014 y se estima que al finalizar el año serán 1.4 millones de visitas extranjeras, de acuerdo al Instituto Nicaragüense de Turis­mo (Intur). Por el desempeño económico, ahora es común encontrar obras en construcción de hoteles, desarrollos inmobiliarios residenciales y co­merciales durante el recorrido por la ruta Managua–Granada, de unos 40 kilómetros. Edificios verticales de más de 10 pisos se construyen en zonas como Santo Domingo y Villa Fontana o cerca de las rotondas Jean Paul Ge­nie y Metrocentro, que son puntos considerados como nuevos polos de desarrollo comercial y de ocio en Managua. El sector privado financia la construcción del aeropuerto Costa Esmeralda, en Tola, con un monto de 12.6 mdd. Frente a playa Sardina, los in­versionistas de la Sociedad Flor de Mayo Nicaragua también iniciaron la construcción de un proyecto residencial valorado en 20 mdd, que incluye condominios, villas, centro comercial y hoteles. Walmart edificó su primera tienda en el país, la cual fue inaugurada en diciembre pasado, con una inversión estimada en 15 mdd, que se suman a 25 millones que destinaron en 2014 para la apertura de siete tiendas, dice Eduardo García, gerente de Asuntos Corporativos de Walmart en Nicaragua. “No es un boom, pero el sec­tor de la construcción crece en promedio 30% cada año desde 2010, sobre todo por el desarrollo inmobiliario de oficinas y hoteles con vocaciones para negocios”, dice Rodrigo Pereira, presidente de la Cámara Nicaragüense de la Construcción (CNC). grafico_inversion_nicaragua_3 El gran proyecto Un tema que llama la atención es el proyecto de construcción del “Gran Canal de Nicaragua”, una obra estimada en 50,000 mdd, que pretende partir en dos al país para formar una ruta marítima entre el océano Pacífico y el mar Caribe, para el paso de buques cargueros. El canal de Nicaragua tendrá una longitud de 280 kilómetros y atrave­sará en 106 kilómetros el Lago Cocibolca y fue entregada en concesión por 50 años a la empresa desarrolladora Hong Kong Nicaragua Development Group (HKND), por el gobierno de Da­niel Ortega. “Una vez que entre en operación el gran canal interoceánico pasare­mos de un crecimiento económico de 4.7 a 10% al año”, confía el gene­ral Álvaro Baltodano. El canal interoceánico de Nica­ragua permitirá el paso de barcos portacontenedores de 25,000 TEU­´s (medida de contenedores de 20 pies), barcos graneleros de 400,000 toneladas y petroleros de 320,000 toneladas, barcos que no podrán pasar por el canal de Panamá aún después de la ampliación que ahora se realiza, pues según sus cálculos, por esta vía pasarán unas 200 mi­llones de toneladas métricas anua­les, poco más del 3% de la carga marítima mundial, de acuerdo con el estudio de viabilidad financiera de HDNK. El documento indica que para 2025 pasarán por el canal nicara­güense 5,100 barcos y 573 millones de toneladas métricas, 4.5% de la carga marítima mundial, con una tasa interna de retorno (TIR) de alrededor de 22%. Para ese gran proyecto habrá una importante demanda de empleos, que moverán la economía desde el próximo año, pues además del canal se planea la construcción de dos puertos, un aeropuerto, carreteras y líneas férreas, además de hoteles y desarrollos inmobiliarios. Según HKND, se generaran 250,000 empleos entre directos e indirectos, de los cuales 50% se­rán reclutados en Nicaragua, 25% de China, sobre todo del personal técnico y responsable de áreas y el 25% restante de otros países cercanos a la región. “El canal generará muchos em­pleos directos, serán más de 50,000, de los cuales 25,000 saldrán de Ni­caragua”, comenta Rodrigo Pereira, presidente de la CNC. La derrama económica que extenderá a empresas como la mexicana Cemex, que abrió en agosto una planta en Managua, con una inversión de 30 mdd, “Cuando nos instalamos en Nicaragua no sabíamos de la construcción del canal, ahora es­tamos muy entusiasmados por el proyecto”, dice Yuri de los Santos Llamas, gerente de la cementera en Nicaragua. “Esperemos que se construya el canal, ayudaría mucho al país, como sucede con Panamá”, dice Víctor Mendoza, un joven de 23 años que trabaja como mesero en un restaurante en el centro turístico de Granada. “Seguro afectará a los animales del Lago (Cocibolca) y la vegetación que hay en la ruta, pero nos hacen falta empleos”, dice. Aun cuando la agencia financiera Bloomberg informó que el empresa­rio Wang Jing, dedicado a las teleco­municaciones y dueño de HDNK Group, perdió 85% de su fortuna en la bolsa de valores de China, la empresa informó que iniciará los trabajos de construcción en 2016 y tendrá listo el canal para entrar en operación cinco años después. Algunos analistas prevén que el pib del país crezca hasta 15% anual­mente si en realidad se construye. “Esperemos que en ese en­tonces tengamos una mayor producción de miel y cacao para aprovechar la ruta del canal y la zona franca, para enviar a mejores precios nuestros productos”, seña­la Lars Saquero, de Ingemann, con una ligera sonrisa.

 

Siguientes artículos

México registra 68 muertes por virus H1N1
Por

El Gobierno mexicano ha detectado 945 casos de H1N1 esta temporada, comparados con sólo cuatro casos y ninguna muerte la...