Aun con el ánimo de su discurso económico, el mandatario estadounidense enfrentará una batalla con los republicanos en el Congreso sobre el presupuesto y por elevar el techo de la deuda.   Reuters   El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, buscó  inyectar impulso a su agenda económica y política con un discurso diseñado para aclarar su visión para su segundo mandato y atacar a los republicanos en la Cámara de Representantes por interferir en su camino. Obama defendió el historial de su Gobierno en el manejo económico a través de la recesión en su primer mandato y dijo que ahora se necesita un nuevo gasto en infraestructura y educación para hacer crecer a la clase media, que dijo que impulsará a la economía de la nación. “A medida que Washington se prepara para entrar en otro debate presupuestario, lo que está en juego para nuestra clase media no podría ser mayor”, dijo Obama en comentarios preparados para una audiencia de seguidores en un gimnasio del Knox College en Galesburg, Illinois. Este otoño boreal, el mandatario estadounidense enfrentará una batalla con los republicanos en el Congreso sobre el presupuesto y por elevar el techo de la deuda. Aunque Obama quiere aumentar la inversión en áreas que dice que fomentarían el crecimiento económico, los republicanos desean recortar el gasto e intentar obligar al Gobierno a reducir su programa de salud. “Necesitaremos que los republicanos en el Congreso dejen a un lado la política de corto plazo y trabajen conmigo para encontrar un terreno común”, dijo Obama. “Puede parecer difícil hoy día, pero si estamos dispuestos a tomar algunas medidas audaces nuestra economía será más sólida en un año”, agregó. Obama planea exponer sus ideas en discursos a través del país en las semanas venideras. En la presentación del miércoles no incluyó nuevas propuestas significativas, pero se espera que dé a conocer nuevas ideas en futuros comentarios. El presidente estadounidense ha dicho que no cree que su discurso cambie la forma de pensar en el Congreso, pero que espera llegar a los electores para que ejerzan presión sobre los legisladores desde sus estados. Los republicanos restaron importancia al discurso, al que calificaron de tener mucha retórica y pocas ideas. “Los estadounidenses no están preguntando ‘¿Dónde están los discursos?’. Están preguntando ‘¿Dónde están los empleos?'”, dijo el congresista republicano y presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner.

 

Siguientes artículos

Google ‘adelgaza’ su tablet, presenta la Nexus 7
Por

La firma busca expandir su presencia en el mercado y garantizar que sus servicios en línea mantengan vigencia en los dis...