Lo medular es que los inversionistas tengan mucha cautela y no comprenr la acción de una OPI en el mercado inmediatamente después de la colocación porque, por lo general, resulta en una transacción perdedora.     Con los inversionistas alertas, nerviosos, expectantes, cautelosos o emocionados ante la inminente OPI (Oferta Pública Inicial) de Twitter (símbolo de cotización TWTR), yo estaba bastante temeroso de que tuviéramos otro fiasco similar al de Facebook. Facebook (FB) aumentó su rango de precio de colocación, así como el número total de acciones en su OPI justo antes de que debutara en mayo de 2012. El movimiento maximizó la cantidad que consiguieron los que apoyaban la operación, pero contribuyó a caídas en el precio de la acción en los primeros días de cotización. Twitter incrementó el rango del precio de su acción de 23 a 25 dólares (un 8.7% – ¡antes de cotizar!), pero mantuvo el tamaño de su oferta en 70 millones de acciones. Especial atención puse a que los “inversionistas institucionales” presionarían a sus corredores de bolsa para comprar tantas acciones de Twitter como les fuera posible, sólo para darse la vuelta y venderlas a un precio mayor a los inversionistas “minoristas”. Los “grandulones” estaban apostando a que otros inversionistas menos informados comprarían la acción a precios más altos. También temía que hubiera gente que pensara que no hay precio que no estuviera dispuesta a pagar por tener acciones de Twitter, aun cuando ésta no genera utilidades. Lo medular es que los inversionistas tengan mucha cautela y no comprar la acción de una OPI en el mercado inmediatamente después de la colocación (a menos que sea uno de los “clientes de élite”), porque por lo general resulta en una transacción perdedora. En lugar de ello, los inversionistas “minoristas” enfrentamos el dilema de comprar la acción después de que empieza a cotizar, no donde la OPI define su precio de colocación. grafica-blog Esta gráfica nos muestra precisamente eso, es decir, lo que sucede con posterioridad a la colocación: un camino errado para los que por ansiedad, compraron después de la OPI. Esta gráfica presenta la historia desde la colocación hasta ahora, pero no nos cuenta la película completa. Existe una técnica (en el Análisis Técnico) de “trading” (comprar y vender) mediante la cual se puede identificar cuándo una OPI ha atravesado por sus diferentes puntos críticos de riesgo y ha definido un patrón relativamente estable para evaluarla bajo un marco de “normalidad”, y no ser lastimado por los favorecidos clientes especiales o las colocadoras de las acciones. Nota: Los agentes colocadores y los clientes “especiales” (que “suscribieron”, es decir, se comprometieron a comprar una posición inicial grande) pudieron haber realizado una ganancia de hasta 100% durante el día de colocación (de 25 hasta 50.09). Al 28 de noviembre de 2013, TWTR ha perdido un 18.3% de su máximo intradía desde su colocación.     Contacto: Página web: www.mentorenacciones.com Correo-e: [email protected]     *Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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