PGR sospecha que Elba Esther planea fuga; insiste en colocarle brazalete

Ante las sospechas de que Elba Esther Gordillo no ha permanecido en su departamento de Polanco en cumplimiento de prisión domiciliaria y los riesgos de fuga, la Procuraduría General de la República (PGR) insiste en que se le coloque de nueva cuenta el brazalete electrónico. La Fiscalía hizo hincapié en las posibilidades de que ese beneficio permitan a la exlideresa magisterial concretar una fuga, lo que “desestabilizar la paz y seguridad del Estado mexicano” dada la influencia moral que aún mantiene en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). La PGR argumenta que existen probabilidades de que Gordillo se sustraiga de la justicia ya que los agentes ministeriales no han podido revisar inmueble donde se encuentra recluida, y por tanto no se ha podido descartar si tiene acceso a un edificio contiguo, el cual podría ser utilizado para transgredir las condiciones del arresto domiciliario del que goza la exdirigente del SNTE. Ayer, un juez federal consideró las razones de la Procuraduría y restringió las visitas y llamadas telefónicas de Elba Esther. En la solicitud de restricción de medidas de seguridad que la PGR entregó al juez Alejandro Caballero, se indica que Gordillo recibe hasta 10 visitas al día y se comunica constantemente por teléfono, convirtiendo el lugar prácticamente en una “oficina de despacho”. Al respecto, el juez consideró que eso impide tener conocimiento sobre los temas que aborda Elba Esther y con qué fines, por lo que existe un riesgo de fuga que desestabilizaría “la paz y la seguridad del Estado mexicano” por su importancia como exdirigente sindical. En dicho informe, la PGR señaló también que los dos elementos de la Policía Federal Ministerial a cargo de la vigilancia de la maestra advirtieron que en ocasiones hay periodos prolongados en los que no tienen contacto visual con ella y que las visitas podrían ser un elemento distractor para que la procesada se ausente del inmueble.