Tras los resultados electorales del pasado 6 de junio, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se convirtió en la organización política “bisagra” de la próxima legislatura en la Cámara de Diputados, de acuerdo con la consultora Integralia, que considera que la solidez del bloque opositor dependerá del comportamiento de los priistas.
“Es posible que la coalición oficialista (Morena y aliados) busque alianzas eventuales con el PRI para alcanzar la mayoría calificada requerida para modificar la Constitución”, señala un informe realizado por dicha consultora encabezada por Luis Carlos Ugalde, expresidente del antes Instituto Federal Electoral (IFE).
Además, agrega que el PAN se consolidó como la segunda fuerza política del país y como la oposición “natural” a Morena a nivel territorial y en el Congreso, pues el blanquiazul conserva las gubernaturas de Aguascalientes, Chihuahua, Guanajuato, Querétaro y Yucatán, y contará con 31 diputados federales más de los que obtuvo en 2018. Por ello, tendrá aproximadamente 121 legisladores en San Lázaro.
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Mientras, Movimiento Ciudadano, señala la consultora, fue el único partido que creció en número absoluto de votos entre 2018 y 2021, pero perdió cuatro curules en la Cámara de Diputados, por lo que la bancada será la más pequeña al tener cerca de 23 legisladores.
“Pese a que consolidó su hegemonía política en Jalisco y su candidato en Nuevo León obtuvo la gubernatura, no ha desarrollado otros enclaves territoriales para ser un partido de dimensión nacional”, menciona el informe.
Frente a ello, añade que el dominio territorial de Morena es cada vez más claro, al conseguir 11 de 15 gubernaturas en disputa, y controlar 52 de los 100 municipios más poblados de México.
“Esto lo posiciona, desde ahora, como favorito rumbo a la elección presidencial de 2024″, asegura.
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