¿Quiénes quieren retrasar el apagón analógico?

El 31 de diciembre de 2015 es la fecha límite para que se haya efectuado en todo el país el apagón analógico. Sin embargo, el Congreso de la Unión y el sector privado solicitaron que el cambio del sistema televisivo analógico al digital se posponga hasta a finales de 2016, debido a que ocho millones de mexicanos se podrían quedar sin señal televisiva.   Las tres principales fuerzas políticas del país, PRI, PAN y PRD, coincidieron en que el apagón analógico se posponga hasta el próximo año. El presidente del PAN, Ricardo Anaya hizo un llamado para retrasar el cambio de señal televisiva, mientras que el senador blanquiazul, Javier Lozano, presentó una iniciativa formal en la cámara alta para este propósito. El legislador panista señaló que la propuesta de su grupo parlamentario en el Senado es ir un año después para no afectar a nadie. “Si no se cumple por lo menos para tener cobertura del 90% de los hogares en todos esos municipios, según los datos de la Sedesol, si no cumple la propia SCT con entregar televisores, no se estaría cumpliendo con la meta y, por lo tanto, no podría ordenarse el apagón por parte del IFT. Deberíamos ir por una reforma al artículo transitorio constitucional”, comentó Lozano en una entrevista con Radio Fórmula. El presidente del PAN, Ricardo Anaya, dijo que para revisar una posible prórroga al apagón analógico es necesario que se entreguen decodificadores y no pantallas y que la entrega de éstos se suspenda al inicio de cada proceso electoral y que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) sea quien entregue los aparatos y no el gobierno federal, como hizo este año. El PRI, el partido con mayoría en las Cámaras de Diputados y de Senadores, se pronunció a favor de la medida. Emilio Gamboa Patrón, coordinador del PRI en el Senado, señaló que el apagón se puede llevar hasta el próximo año. Tras lo sucedido en Monterrey, en la que entre el 10 y 14% de la población en la zona metropolitana de Monterrey se quedaron sin señal tras aplicarse el apagón analógico, Gamboa Patrón dijo que la próxima semana al IFT y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), para que nos expliquen hasta dónde puede dañar a la ciudadanía. El partido del Sol Azteca solicitará que comparezcan en la Cámara de Diputados el presidente del IFT, Gabriel Contreras, y el secretario de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza. Pero el órgano regulador dijo en conferencia de prensa el pasado domingo que el apagón analógico se finalizará el último día de 2015, por lo que no solicitó hasta el momento una prórroga, aseguró el presidente del IFT, Gabriel Contreras. Contreras expuso que el cambio de señal “no es un capricho”, ya que este proceso está plasmado en la Constitución, pues representa beneficios importantes para la población, como tener más canales y de mayor calidad de imagen. La propuesta de retrasar el apagón analógico nace, debido a que entre un 10% y 14.3% de la población de Monterrey, Nuevo León, es incapaz de recibir señales digitales, pues sus aparatos de televisor aún funcionan con tecnología análoga. “Se habla de un número que oscila entre 473,000 y 645,000 personas que dejaron de recibir el servicio televisión. No es un tema menor”, resaltó la firma CIU en un estudio.   “8 millones de mexicanos se quedarán sin derecho a ver televisión”: Emilo Azcárraga El presidente de Grupo Televisa, Emilio Azcárraga, también se pronunció al respecto. En una entrevista a Radio Fórmula ayer 21 de octubre, el directivo propuso que el cambio de señala televisa se retrase. El presidente del mayor productor de contenidos en habla hispana dijo que su compañía no está en contra del apagón analógico, pero puntualizó que, en caso de que se finalice el proceso el próximo 31 de diciembre, alrededor del 10% de la población mexicana se quedaría sin señal de televisión, entre entre 7 u 8 millones de mexicanos. Azcárraga comentó que Grupo Televisa ya hizo la inversión para la transmisión de la señal analógica. “Técnicamente ya hicimos la inversión, ya tomamos el costo y para nosotros no es ningún problema seguir, no queremos boicotear esto, sino defender el derecho de tener la televisión abierta”. Al segundo trimestre de 2015, Televisa reportó una disminución de ingresos por publicidad de 16.4% hasta 5,238 millones de pesos (mdp). La publicidad por venta de canales es un ingreso importante para el grupo. Las ventas por este rubro fueron de 854 mdp, 27.1% más que en el segundo trimestre de 2014.     ¿Cómo se podría posponer el apagón analógico para 2016? La única manera para posponer el cambio de la señal de televisión es reformar el artículo decimonoveno de la Ley Federal de Telecomunicaciones. Gamboa Patrón señaló que en 10 días se podría definir prórroga para apagón analógico, por lo que espera la voluntad de las demás fuerzas políticas para reformas el artículo. Roberto Gil Zuarth, presidente del Senado de la República e integrante de la bancada del PAN, señaló que para aplazar hasta 2016 el apagón analógico se requiere de una reforma constitucional que sea trabajada y en acuerdo entre las Cámaras baja y alta. “El apagón analógico está regulado en un transitorio constitucional, la única manera de modificar esa condición constitucional es modificando el transitorio; y eso requiere que el poder revisor de la Constitución se active; implica mayorías calificadas de dos tercios en las dos cámaras e implica también que las legislaturas de los estados participen. Es una suerte de reforma constitucional, para decirlo pronto”, explicó el senador. El Instituto del Derecho a las Telecomunicaciones (IDET) advirtió desde febrero de este año que existían diversos riesgos que impiden el cumplimiento del apagón tecnológico en todo el país al final de 2015. “El proceso se ha visto inmerso en innumerables cambios, insuficiencias y recortes presupuestales e incumplimiento de plazos para alcanzar el apagón analógico nacional.” El órgano señaló que, de retrasarse de nuevo el proceso, también se aplazarán otros proyectos del gobierno federal, como la instalación de la red pública compartida de telecomunicaciones que impulsará el acceso efectivo a la banda ancha y, sobre todo, “se privaría del principal medio de acceso a la información aún para un importante porcentaje de la población.”