De continuar los subsidios a las gasolinas para contener sus precios ante el alza mundial de los combustibles por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, la recaudación del Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) en el país sería negativa en los próximos meses, estimó BBVA México.
La institución financiera indicó que los mayores precios del petróleo están ayudando a las finanzas públicas, pero las cotizaciones internacionales más altas de las gasolinas han eliminado la recaudación por IEPS gasolinas y diésel.
“De continuar esta resistencia del gobierno federal y las cotizaciones internacionales de las gasolinas en niveles similares a los actuales, la recaudación por IEPS gasolinas y diésel podría inclusive ser negativa en los siguientes meses”, dijo el área de análisis de la institución.
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En este sentido, precisó que un incremento de 33.3% en el precio internacional de la gasolina convencional por lo general tiene un impacto inmediato en la recaudación por IEPS gasolinas y diésel de -72.8%.
“Este incremento propicia una reducción trimestral adicional de 81.7% en dicha recaudación durante el trimestre posterior y dos trimestres después del choque al precio internacional de la gasolina se desvanece el efecto al no ser estadísticamente diferente de cero”, explicó.
Sin embargo, recordó que no sería la primera vez en la que se observara un subsidio público al consumo de gasolinas en México, ya que su recaudación ha sido negativa en 2 periodos; la primera vez entre el cuarto trimestre de 2005 y el cuarto trimestre de 2008.
Por su parte, la segunda instancia de este tipo de subsidio se presentó entre el tercer trimestre de 2009 y el tercer trimestre de 2014.
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Asimismo, BBVA explicó que, si bien, los vínculos comerciales de México con Rusia y Ucrania “no son relativamente fuertes”, el impacto de dicho conflicto ya se está siente principalmente en los ingresos públicos y precios al consumidor.
El banco expuso que los precios al consumidor se verán directamente afectados por los mayores precios de los productos energéticos e indirectamente por los incrementos en los internacionales de granos y metales.
Esto, estimó, afectará tanto la inflación no subyacente como la subyacente a través de mayores precios de mercancías alimenticias y no alimenticias.
Asimismo, consideró que la mayor inflación en el corto plazo y el incremento en los riesgos alcistas sobre la tendencia futura de esta se reflejarán en mayores tasas de interés a las anteriormente previstas.
“Anticipamos que Banxico subirá nuevamente la tasa de referencia en 50 puntos base de 6 a 6.50 por ciento esta semana y que la llevará a niveles de 8 por ciento al cierre del año”, adelantó el banco.
En este sentido, detalló que una mayor inflación que impactará el ingreso disponible de los hogares (de no verse compensada por aumentos en los salarios reales) y una postura monetaria más restrictiva para acotar los riesgos inflacionarios limitarán el crecimiento económico.
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