Cancún, la joya de la corona, está en riesgo. A las disputas criminales por el control del narcomenudeo se suman a la presencia de sujetos ligados a bandas internacionales que se dedican a la trata de personas, el tráfico de armas y el lavado de dinero.

Actúan ahí desde hace años, pero su presencia se ha hecho más visible en las últimas semanas. El homicidio de ciudadanos canadienses es la muestra de un problema mucho más profundo y de consecuencias aún inciertas.

Cancún, como la Rivera Maya, es un lugar atractivo a jefes de bandas internacionales, porque pueden pasar desapercibidos entre los millones de turistas que lo visitan. Están en posibilidad de reunirse y pactar negocios con relativa facilidad. Es uno de los destinos turísticos más importantes del mundo y ello conlleva riesgos que no siempre son enfrentados con anticipación.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

Las alarmas están prendidas y no solo en México, sino también en Canadá y en Estados Unidos y por ello se anunció la participación de la Policía Montada y la DEA en algunas de las indagatorias sobe lo que está ocurriendo.

La Rivera Maya, después de todo, concentra una cantidad nada despreciable de venta de drogas y ello genera tráfico hacia otros lugares, no necesariamente parecido al de las organizaciones tradicionales, pero igual de problemático.

Las consecuencias de no hacer la tarea, ante grupos de carácter local, puede traer consecuencias funestas, como ya ocurre con el aumento de la de la extorsión, a la que hay que añadirle la venta de protección, la apropiación de la renta por parte de los bandidos, con todo lo ello implica para le economía y para la tranquilidad de empresarios, sobre todo pequeños y medianos.

Las autoridades han reaccionado con operativos de disuasión, como son los patrullajes de elementos de la Guardia Nacional en las playas, para evitar ataques en los hoteles, como ya ha ocurrido. Es una medida correcta, pero a ello se debe sumar un trabajo de inteligencia que lleve al debilitamiento y desarticulación de las organizaciones delictivas, incidiendo, además, en un panorama con alta densidad criminal.

¿Ya nos tienes en Facebook? Danos like y recibe la mejor información

Los próximos meses serán de campañas electorales por la gubernatura. Las agendas están ya puestas en la disputa por el poder político, por ello importante tomar en cuenta todo lo que está en riesgo en este momento.

La historia ayuda. Quintana Roo es un espacio de gobernabilidad complicada y de múltiples y poderosos intereses. Dos mandatarios, Mario Villanueva y Roberto Borge, terminaron tras las rejas. El dinero corre y ello conlleva siempre otras sorpresas y no siempre agradables.

Ahí se han disputado inclusive sucesiones de carácter criminal y del más alto nivel, como cuando asesinaron a Rafael Aguilar Guajardo, entonces líder del cártel de Juárez abriendo el paso a Amado Carrillo Fuentes.

Cancún y la Rivera Maya son una joya, sí, pero rodeada de muchos peligros.

Suscríbete a Forbes México

Contacto:

Twitter: @jandradej

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

Una mirada a 2022: avances tecnológicos y más allá
Por

Los últimos 2 años han estado marcados por acontecimientos que pasarán a la historia por la magnitud de su impacto en el...