El gobierno de Nuevo León es el primero en levantar la mano para aprovechar las oportunidades de negocio que abrirá la aprobación de la reforma energética.     Por Ricardo Pérez   MONTERREY.-  Nuevo León levanta la mano. Hay un consenso entre especialistas que los efectos de la reforma energética serán de mediano y largo plazos; al menos a partir de dos o tres años se verán los impactos, tanto en rendimiento, como en empleo y abaratamiento de energéticos, por ejemplo, las tarifas de electricidad. El gobierno de Rodrigo Medina es el primero en manifestar que pretende aprovechar estos beneficios de la recién aprobada reforma energética. El estado de Nuevo León, sin duda uno de los más pujantes en cuanto a la economía, las inversiones y el empleo en el país, se destaca, junto a Tamaulipas y Coahuila, en el potencial  de la  Cuenca de Burgos, como la reserva de gas natural no asociado más importante del país. Colinda al Norte con los Estados Unidos y al Oriente con el margen occidental del Golfo de México, cubriendo una superficie de 109,605 km2. Pemex estima que para 2027 producirá más de la tercera parte (35.8%) de la generación de gas natural del país. Actualmente México es un importador neto de gas natural; con la generación de la Cuenca de Burgos se tendrá una mayor disponibilidad de este energético a precios menores, elevando la competitividad de los sectores consumidores. Para ello se requiere una adecuada ley secundaria que establezca un régimen fiscal adecuado con su decrecimiento. Nuevo León, es el tercer lugar en cuanto a generación de energía eléctrica y gas, sólo después de Veracruz y Tamaulipas. El objetivo del gobierno de Nuevo León de aprovechar la reforma energética tiene efectos en todas las cadenas relacionadas con la rama de Suministro de electricidad, agua y gas, desde su comercialización, hasta el desarrollo de industrias relacionadas, como suministros de todo tipo de componentes eléctricos y gases (como accesorios para instalaciones eléctricas, tuberías e incluso refinación de petróleo), alimentos y bebidas, pasando por industrias que generan sus insumos, tales como planeación y financiamiento e infraestructura. La Secretaría de Desarrollo Económico de Nuevo León estima, con base en datos de INEGI, que la actividad relacionada con la generación, transmisión y suministro de energía eléctrica se encuentra con el mayor rendimiento en el estado, ofreciendo por cada millón de pesos invertidos un retorno de 1.42 millones de pesos, y a su vez genera alrededor de 12.6 empleos por cada millón de pesos que se invierta. En contraste, a escala nacional, con una inversión de 1 millón de pesos en la generación de energía eléctrica el empleo se incrementa en 2.4 unidades. En Nuevo León no se extrae petróleo crudo, pero sí es de los principales fabricantes y empleadores a nivel nacional en la producción de derivados del petróleo. Contribuye con cerca del 13% del empleo en esta actividad, sólo un poco menos que Guanajuato (que lo hace con cerca del 15%), pero es el principal productor, con cerca del 16% del total nacional. La producción nacional de crudo alcanza los 2.5 millones de barriles diarios actualmente, que se distribuyen hacia tres grandes rubros como lo son las refinerías, las plantas petroquímicas y a terminales de exportación. Lo destinado a las refinerías es de alrededor de 1.64 millones de barriles diarios, mientras que el resto es distribuido hacia las terminales de exportación en su mayoría. Hoy en día Pemex cuenta con seis refinerías; las principales son las ubicadas en Salina Cruz, Oaxaca y en Tula, Hidalgo. En tercer lugar se encuentra la de Cadereyta, Nuevo León, que mantiene el 16.2% de la producción nacional. La política del gobierno de Nuevo León para aprovechar la reforma energética incluye como objetivos estratégicos el Crecimiento y desarrollo económico; Inclusión social; Transporte, almacenamiento y distribución; Refinación, procesamiento y generación; Contribución a las metas nacionales en materia petrolera; Transición energética; Sostenibilidad del sector; y la Eficiencia energética y ambiental. Busca establecer una política de promoción de inversiones para el desarrollo del sector energético, satisfacer el abastecimiento de energía de acuerdo a las expectativas de crecimiento y promover el uso eficiente de energía en todos los sectores. En cuanto a la inclusión social, tiene como objetivo facilitar el acceso de la energía de acuerdo con las necesidades poblacionales. Particularmente promover la ampliación del acceso de energía a comunidades menos favorecidas, incrementar programas existentes para promover el uso de tecnologías o productos tecnológicos que reduzcan los impactos a la salud e incrementen la eficiencia y establecer programas de apoyo a la población de escasos recursos para adoptar tecnologías eficientes y/o energías renovables. El día de hoy, ante líderes empresariales, académicos y políticos, incluido el Secretario de Energía Pedro Joaquín Coldwell, el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina, presentó el Plan sectorial de Energía del Estado de Nuevo León, que será implementado por el Dr. Rolando Zubirán Robert, titular del ramo.

 

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