El gobierno de la Ciudad de México promoverá una reforma penitenciaria para pasar la administración de las cárceles y centros de reclusión de la Secretaría de Gobierno a la de Seguridad Ciudadana.
Así lo anunció este viernes la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, en un mensaje a medios en el que no se aceptaron preguntas, puesto que la próxima semana el titular de la Policía, Omar García Harfuch, dará detalles sobre el tema.
La Secretaría de Gobierno tiene en su estructura una subsecretaría de Sistema Penitenciario, que es encabezada por Antonio Hazael Ruiz Ortega desde el 1 de noviembre de 2013. Debido a la reforma penitenciaria que se impulsará, su administración pasará a la Secretaría de Seguridad Ciudadana, con el objetivo de reforzar la investigación y prevención de delitos que se gestan en las cárceles.
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La transición será gradual, explicó el secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, y se hace con el objetivo de “fortalecer el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México, dar un proyecto y un servicio de carrera a todo el personal que labora en el mismo, mejorar la calidad de vida de los internos, mejorar y fortalecer el proyecto de reinserción social, así para los internos como para sus familias”.
“Esta acción contribuirá, además, para que se tenga un control más efectivo de los Centros Penitenciarios, Centro de Sanciones Administrativas y de Integración Social y de Centros Especializados. Incorporaremos las funciones de inteligencia de investigación para fortalecer la prevención de delitos que se podrían planifican desde el interior de algún Centro, tales como el secuestro y extorsión telefónica, o cualquier tipo de delito. Incrementaremos los mecanismos para el procesamiento de la información penitenciario”, añadió el jefe de la Policía.
Que el Sistema Penitenciario esté bajo el mando de la Secretaría de Seguridad, dijo García Harfuch, permitirá “la coordinación interinstitucional que se mantiene de manera estrecha con la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, en este caso para aportar información que contribuya a la investigación de delitos que ocurren en la Ciudad de México”.
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El Sistema Penitenciario de la capital consta de tres reclusorios (norte, sur y oriente), dos centros de sanciones penales varoniles (norte y oriente), una penitenciaría, un centro varonil de rehabilitación psicosocial, un centro varonil de reinserción social y dos centros femeniles de reinserción social. En todos estos espacios actualmente hay una población privada de su libertad de 26 mil 229 personas.
De acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en el Reclusorio Varonil Norte, por ejemplo, se han detectado problemas como sobrepoblación, hacinamiento, insuficiencia de personal de seguridad y custodia, presencia de actividades ilícitas, así como inadecuada clasificación de las personas privadas de la libertad e insuficiencia o inexistencia de actividades educativas.
Para el personal que labora en el Sistema Penitenciario de la ciudad se proporcionará el Servicio Profesional de Carrera. “La Universidad de la Policía de la Ciudad de México estará a cargo de la formación y especialización del personal de seguridad y custodia penitenciaria, con base en planes y programas educativos apegados al Programa Rector de Profesionalización aprobado por el Consejo Nacional de Seguridad Pública”.
También “se fortalecerán los programas de supervisión y control del personal directivo, administrativo y operativo de los Centros Penitenciarios y también tendrán facultades el área de Asuntos Internos de la Secretaría para investigar cualquier tipo de ilícito que suceda con este personal”.
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