Más ligera, más potente, mejor diseñada y con la biblioteca de apps más extensa, la nueva iPad es nuestra tablet favorita.
No, este no fue el año de una nueva generación de gadgets Apple. De entre la reducida línea de productos de la empresa de Cupertino sólo la Mac Pro recibió un rediseño, el resto, sólo una actualización. Ése es el caso del iPad.
Al iPad 4 lo metieron al quirófano, le hicieron la lipo y le pusieron un par de bocinas nuevas, un procesador más potente y un coprocesador de movimiento, todo, para dotarlo del mismo carácter que hace tan atractivo a su hermano menor: el iPad Mini.
Así las cosas, el iPad Air es una adaptación de la línea del exitoso Mini, y una muy bien lograda.
Con 20% menos del tamaño y 28% menos del peso de su predecesor, el Air es una tableta de aluminio y vidrio que se siente muy ligera pero también sumamente sólida. La pantalla retina tiene las mismas dimensiones que la versión anterior, la reducción de dimensiones tuvo lugar en el marco y en el interior del equipo.
Hardware
El equipo de diseño tuvo éxito encogiendo la tablet sin que perdiera ninguna funcionalidad, e incluso logró instalar un coprocesador nuevo, el M7, que se encarga de llevar un registro pormenorizado de los movimientos del dispositivo a través de las lecturas arrojadas por los diversos sensores, ahorrando ese trabajo al procesador y alargando la vida de la batería.
El Air comparte con el iPhone 5S las especificaciones de procesamiento y memoria, no es un aparato particularmente musculoso (
la tablet Galaxy Note 10.1 2014 tiene el triple de RAM, por ejemplo), pero su procesador a 64 bits y su procesador de gráficos de cuatro núcleos compensan en los hechos lo que en el papel luce desbalanceado.
Las cámaras del Air, de 5 y 1.3 megapixeles, hacen su trabajo de forma solvente sin ser espectaculares, pero sí destacando sobre su competencia, son confiable y eficientes.
En el departamento de sonido, a pesar de contar por primera vez con dos altavoces (era una infamia que el iPad 4 fuera monoaural a estas alturas), éstas siguen apuntando hacia atrás, haciendo que la experiencia, particularmente si se quiere ver una película o jugar algún videojuego, no sea tan satisfactoria. (En ese sentido
la YogaTablet de Lenovo logró un avance digno de aplauso de pie.)
Por su parte, la reducción de peso, de 672 a 470 gramos podría no parecer significativa, pero se nota y agradece tremendamente, en especial cuando se lee en la cama, por ejemplo.
Finalmente, probamos la versión WiFi + 3G/LTE, y nuestro consejo es: consigan un plan de datos GRANDE, porque si tienen suerte de encontrarse en un área con cobertura LTE, sus megabytes se pueden evaporar.
Así luce la antena que permite la conexión 3G /LTE.
El Air tiene, al igual que el iPhone 5S, iOS 7 precargado, la última versión del software móvil de Apple está diseñada para correr en esos equipos y viceversa.
Si bien en la cancha de los smartphones Android e iOS tienen prestaciones similares e interfaces fluidas, divertidas y eficientes, en el caso de las tablets la experiencia ofrecida por el iOS continúa siendo claramente superior. Las razones son muchas, pero entre las principales podríamos citar el ambiente controlado que implica trabajar con un solo aparato en vez de muchos y, en segundo lugar, las aplicaciones.
Sí, las tablets Android se venden como pan caliente (Samsung ya es líder en venta de tablets y Lenovo, el fabricante de PCs más grande del mundo, ya vende más tablets que máquinas de escritorio), pero buena parte de las apps de mayor calidad están en la tienda de Apple ¿por qué? La respuesta corta es que los usuarios de iOS tienden más a pagar por ellas y es mucho más fácil piratear una app en Android, así que para un desarrollador la elección no es complicada.
Y más allá de la extensa librería de aplicaciones, la adaptación del iOS a un gadget tan grande como un iPad no hace que se pierda la esencia ni funcionalidad. Incluso podríamos decir que las transiciones entre aplicaciones, los gestos y muchos de los pequeños detalles del iOS 7 se disfrutan más en un iPad que en un iPhone.
Por último, la inclusión de la paquetería de oficina de Apple (Pages, Numbers y Keynote) de forma gratuita es una buena jugada por parte de la compañía para intentar contrarrestar la influencia de la suite de oficina de Google y ofrecer una herramienta de trabajo para el iPad, un dispositivo que por su naturaleza resulta con frecuencia más útil para el consumo de medios, el ocio y el entretemiento.
Balance
Muchos afirman que la que alguna vez fuera una de las firmas de tecnología mas innovadoras ha perdido el toque, que la herencia de Steve Jobs se disuelve con el paso de los días y que urge la llegada de un personaje que dé un nuevo rumbo a la compañía, sin embargo el equipo detrás de los iGadgets al menos ha logrado mantener la calidad en el diseño y no perder de foco la funcionalidad de sus productos.
Si bien el iPad Air no es un cambio radical entre sus predecesores, la dosis de cambios es la justa para ofrecer una experiencia mejorada, particularmente si consideramos que no hubo un incremento significativo en los precios con respecto al iPad 4 (Su precio arranca en los 7,800 pesos).
En el lado positivo, el Air es un dispositivo muy ligero y poderoso, con una batería de más de 10 horas, un sistema operativo dinámico y funcional, y la mejor biblioteca de aplicaciones.
En el lado negativo, tanto la dirección del audio como la limitación de no poder extender la capacidad de almacenamiento interno ni tener un acceso sencillo a los archivos son temas que Apple deberá resolver en el futuro.
Especificaciones técnicas:
· Pantalla LCD con LED backlit de 9.7 pulgadas, 1536 x 2048 pixeles
· Procesador A7 a 1.3 GHz de dos núcleos
· Gráficos: PowerVR G6430 de cuatro núcleos
· Procesador de movimiento M7
· 16, 32, 64 o 128 GB de almacenamiento no escalable
· 1 GB de memoria RAM
· Cámara principal de 5 MP, graba video a 1080p a 30 fps
· Cámara frontal de 1.2 MP, graba video a 720p a 30 fps
· Peso: 469 g (WiFi), 478 g (3G/LTE).
· Dimensiones: 240 x 169.5 x 7.5 mm
· OS: iOS 7
· Operadores: Iusacell, Movistar y Telcel
· Colores: Plata y gris espacial
