Al día de hoy existe todavía un alto grado de incertidumbre en términos de la duración y magnitud del conflicto entre Ucrania y Rusia. Las tensiones geopolíticas han escalado después de la decisión de Rusia de invadir territorio ucraniano la semana pasada. Como consecuencia, los Estados Unidos y países aliados que forman parte de la OTAN han llevado a cabo una serie de sanciones económicas sin precedentes contra el gobierno de Moscú, empresas rusas y oligarcas asociados al régimen de Vladimir Putin. Esta compleja situación ha traído consigo dudas importantes sobre los posibles efectos para la economía. En este artículo analizaré algunos de ellos, tanto para el mundo como para la economía mexicana.

Las sanciones económicas que ha impuesto Occidente a Rusia han representado un viento en contra para la recuperación económica global, al menos en tres frentes: comercial, inflacionario y financiero. Es indudable que conforme transcurran más días del conflicto, estas restricciones irán ocasionando un deterioro exponencial en el bienestar de la población rusa, pero también tendrá ramificaciones hacia el resto de la economía global.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

Sanciones económicas afectarán el comercio internacional

El comercio internacional se verá afectado por una serie de medidas que tienen como objetivo limitar el margen de maniobra de Rusia, entre ellas destacan las restricciones sobre el Banco Central de la Federación Rusa en el uso y acceso a parte de sus reservas internacionales. Vale la pena recordar que Rusia cuenta con cerca de 630,000 millones de dólares en reservas, de las cuales el 73% están en moneda extranjera, 21% en oro, 4% en Derechos Especiales de Giro, 1% en posiciones de reserva el FMI y otro 1% en otros activos financieros. Esto signficia una limitación importante en el uso de monedas de reserva (como el dólar americano, el euro o la libra esterlina) que puedan permitir las transacciones internacionales de empresas o del gobierno.

A esto hay que agregar el bloqueo que enfrentarán los bancos rusos del SWIFT, una situación que podría mermar sus hojas de balance y desatar una corrida bancaria. Asimismo, autoridades financieras de EE.UU., Reino Unido y varios países más han restringido las operaciones de bancos como Sberbank, VTB Bank, Alfa-Bank, Bank Otkritie, Bank Rossyia, Promsvyazbank, Sovcombank y Novikombank.

Por otra parte, han tenido lugar una serie de medidas retaliatorias por parte de grandes empresas de Occidente con presencia en Rusia, que han cerrado completamente sus operaciones. A pesar de que los efectos adversos son asimétricos, esto representara un viento en contra para la recuperación de diversos sectores. También se verá afectado el comercio de gas natural y petróleo, especialmente hacia Alemania y el resto de los países de la Unión Europea, que son altamente dependientes de los energéticos rusos (e.g. el gas natural proveniente de Rusia representa el 32% del total utilizado en Alemania). 

El conflicto incrementa los riesgos de mayor persistencia de la inflación

El mundo experimentó fuertes presiones inflacionarias en el 2021, no observadas en varias décadas, debido a las disrupciones de oferta y otros choques ocasionados por la pandemia. Al inicio de este 2022 muchas de las condiciones prevalecen, sugiriendo una mayor persistencia de la elevada inflación global. Sin embargo, el incremento en los precios de algunas materias primas, como el gas natural (operando en Europa en precios máximos históricos), petróleo (con el Brent alcanzando un precio no observado desde 2008) y algunos granos, que se asocian directamente al conflicto entre Ucrania y Rusia representan un mayor riesgo para la inflación en el mundo.

¿Ya nos tienes en Facebook? Danos like y recibe la mejor información

Volatilidad y aversión al riesgo en los mercados financieros

Otro de los efectos de las hostilidades entre ambas naciones, que además se encuentra fuertemente correlacionado con los temas previos, se centra en la reacción de los mercados financieros interncionales. A pesar de que todavía se observan movimientos relativamente acotados (especialmente cuando se compara la situación actual con otros eventos de estrés geopolítico en años previos), no debemos descartar que la volatilidad y el incremento en las primas de riesgo prevalecerán. A esto debemos de agregar que este conflicto geopolítico le agrega un alto grado de complejidad a la política monetaria global.

Los posibles efectos sobre la economía mexicana

Respecto a México, el vínculo comercial con Rusia es muy limitado, ya que es nuestro 28º socio comercial, representando un comercio bilateral de 1,954 millones de dólares en promedio los últimos 5 años (2017 a 2021), mientras que Ucrania es el lugar 66º, con un comercio bilateral de 236 millones de dólares al año en promedio en el mismo periodo de tiempo. Esto se compara de manera sustancialmente baja con el nivel de comercio bilateral que tenemos con nuestro principal socio comercial, EE.UU., que es mayor a los 500,000 millones de dólares. En términos de la composición comercial, las principales importaciones son fertilizantes de Rusia y trigo de Ucrania. Mientras que las exportaciones más relevantes son componentes para el sector automotriz hacia Rusia y cerveza a Ucrania. 

Es importante tomar en cuenta que también cualquier afectación de este riesgo geopolítico sobre la economía de la Eurozona podría tener repercursiones en la inversión extranjera directa que proviene de dicha región o la relación comercial que tenemos en diversos productos (e.g. sector automotriz). Desafortunadamente, hasta el momento es muy complicado cuantificar estos efectos por la gran incertidumbre en torno a este tema.

Por otra parte, las consecuencias del incremento en los precios de las materias primas previamente mencionado podría resultar en una mayor persistencia de la inflación a lo largo de este 2022. Asimismo, consideramos que el conflicto entre Ucrania y Rusia podría continuar generando una mayor volatilidad y aversión al riesgo en los mercados financieros internacionales, afectando temporalmente activos como el peso mexicano. No obstante, también podríamos observar una recomposición de flujos de capital por la salida de Rusia y la posible entrada a otras economías emergentes, entre ellas México.

Para concluir este artículo, debemos de reflexionar que los riesgos geopolíticos normalmente son asimétricos y difíciles de cuantificar, especialmente cuando tomamos en cuenta perfiles de personalidad como la que tiene el presidente Vladimir Putin. Esto sugiere que todavía estamos en un terreno incierto en relación a este tema, lo cual podría exacerbar algunos de los efectos del conflicto en Ucrania sobre la economía global en distintos frentes. Estos efectos dependerán del tiempo que dure esta situación y el alcance de las tensiones geopolíticas entre ambas naciones.

Contacto:

*Alejandro Padilla es Director General Adjunto de Análisis Económico y Financiero de Grupo Financiero Banorte. Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad del autor y no representan la opinión de Grupo Financiero Banorte ni sus subsidiarias o filiales.

Twitter: @alexpadillasan

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

Ciberataque
Resistencia cibernética en atención médica: Bienestar y progreso para la sociedad
Por

Hoy más que nunca es de gran importancia que los tomadores de decisiones clave coloquen la seguridad intrínseca en el ce...