El Consejo Nacional Agropecuario (CNA) advirtió que el cambio climático, la sequía y las olas de calor han puesto en riesgo la seguridad alimentaria, ya que ha provocado escasez de alimento y un incremento de los precios de los insumos agrícolas en México y el mundo.
“Las emisiones de gases de efecto invernadero están aumentando, lo que está provocando un calentamiento global y esto está afectando la producción agrícola, lo que está llevando a una escasez de alimentos y a un aumento de los precios”, afirmó el organismo dirigido por Juan Cortina Gallardo.
Agregó que el aumento de las temperaturas ha impactado la producción de alimentos en todo el mundo, especialmente en la agricultura.
La sequía y las olas de calor afectan la calidad y los rendimientos de los cultivos cíclicos y perennes, lo que lleva a una caída en la oferta y aumentos en los precios, declaró el órgano encargado de impulsar la industria agrícola en México.
Además, la falta de agua y el calor extremo pueden causar la muerte temprana de plantas y afectar el tamaño y la calidad de los frutos, manifestó.
En julio de 2023 se dio el mes más caluroso a nivel mundial, con temperaturas récord y máximas oceánicas inusualmente altas, precisó.
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En México, la sequía ha afectado a más de 1,300 municipios y ha retrasado el inicio de las siembras para el ciclo primavera-verano, de acuerdo con un análisis del Consejo Nacional Agropecuario.
El porcentaje de áreas con sequía de moderada a extrema en México al 15 de julio de 2023 fue de 43.26 por ciento, mayor en 1.76 por ciento a lo cuantificado al 30 de junio del mismo año.
Hoy es urgente que los países desarrollados y emergentes tomen medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse a los efectos del cambio climático, manifestó la institución.
“Pueden hacer esto apoyando prácticas sustentables en la agricultura, desarrollando tecnologías avanzadas y educando a las personas sobre el cambio climático”, comentó.
Según el CNA, el calentamiento global es un problema urgente que está causando una serie de impactos negativos en todo el mundo: “las temperaturas más altas, las sequías y las olas de calor están afectando la producción agrícola”.
Las olas de calor han afectado a América del Norte, Asia y Europa, causando incendios forestales que impactan la salud, el medio ambiente y la economía, precisó.
La sequía prolongada ha afectado múltiples sectores como económico, agricultura, energía, transporte y suministro de agua, explicó el CNA.
El cambio climático ha ralentizado la productividad mundial en un 21 por ciento desde 1960 y hasta un 40 por ciento en algunas áreas tropicales, intensificando sus efectos adversos, añadió.
“El futuro de la alimentación depende de la sustentabilidad y la adaptación. Los países deben trabajar juntos para encontrar soluciones a este problema urgente”, concluyó.
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