Rogelio Ramírez de la O, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), afirmó que la inflación es la principal preocupación del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, por lo que se privilegiaron medidas de oferta para reducir el precio de los alimentos.
“Estamos observando con preocupación el fenómeno mundial y sabemos que en varios países la inflación viene por el lado de la demanda, por lo que va a requerir unas dosis de aumentos de tasas de interés bastantes fuertes, que creo que presentan el peligro de causar impactos recesivos”, comentó.
La inflación registrada en México es importada, aseguró el funcionario, por lo que la respuesta ha sido por el lado de la oferta: “entonces estamos impulsando la producción de maíz, frijol, soya y verduras”.
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En ese marco, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador abrió la economía mexicana a las importaciones de alimentos como nunca había pasado, dijo el funcionario durante el conversatorio con ministros de Hacienda sobre política fiscal organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
“Estamos eliminando temporalmente los requisitos burocráticos, medidas no arancelarias para la importación de un selecto número de empresas, que dominan 80% de la distribución de alimentos”, dijo Ramírez de la O.
Una mayor eliminación de trámites burocráticos y de cobro de aranceles no se hace porque en 15 empresas está la concentración, recordó el titular de la SHCP.
El secretario agregó que el programa piloto para beneficiar con la eliminación de trámites burocráticos y el cobro de aranceles concluirá en febrero próximo de 2023.
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Adicionalmente, el funcionario mencionó que el gobierno de López Obrador, en su lucha contra la carestía, apostó a estabilizar los precios de los energéticos, de forma que la inflación hoy ha tenido un crecimiento de 8.7% cuando podría ser más alta.
El gobierno de México, comentó, ha invertido 1.5 puntos porcentuales del producto interno bruto (PIB) en estabilizar el precio de la gasolina; ante ello, invitó al sector privado a hacer lo propio en el sector de alimentos.
Ramírez de la O apuntó, además, que México es una de las economías más abiertas del mundo, ya que las exportaciones representan 38% del PIB, situación que deja al país en condiciones de mucha exposición frente a los ciclos mundiales y particularmente los de Estados Unidos.
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