Reuters.- Las gimnastas olímpicas Simone Biles y Aly Raisman testificarán este día sobre los abusos sexuales que sufrieron a las manos del médico del equipo olímpico de gimnasia de Estados Unidos, Larry Nassar, mientras el Senado examina por qué el FBI no investigó los crímenes antes.

Biles y Raisman se presentarán ante la Comisión Judicial del Senado junto a su excompañera olímpica McKayla Maroney y la exgimnasta Maggie Nichols, quien fue la primera víctima que reportó los abusos a USA Gymnastics.

La audiencia ocurre después de que el Inspector General del Departamento de Justicia Michael Horowitz emitió en julio un duro reporte que criticó al FBI por estropear la investigación con una serie de errores que permitieron que los abusos continuaran por meses.

Lee también: ‘Somos humanos’, Biles pidió hablar sobre salud mental con atletas

Horowitz también testificará hoy, así como el director del FBI, Chris Wray, quien se espera que enfrente un duro interrogatorio de miembros de ambos partidos sobre por qué los agentes que arruinaron la investigación nunca fueron procesados por su conducta impropia.

La investigación del FBI sobre Nassar comenzó en julio de 2015, después de que el presidente y director ejecutivo de USA Gymnastics, Stephen Penny, informó las acusaciones a la oficina de campo del FBI en Indianápolis y proporcionó a los agentes los nombres de tres víctimas que deseaban ser entrevistadas.

Esa oficina, entonces dirigida por el agente especial a cargo W. Jay Abbott, no abrió formalmente una investigación. El FBI solo entrevistó a un testigo meses después, en septiembre de 2015, y no documentó formalmente esa entrevista en un informe oficial conocido como “302” hasta febrero de 2017, mucho después de que el FBI arrestara a Nassar por cargos de posesión de imágenes sexualmente explícitas de menores en diciembre de 2016.

Cuando la entrevista fue finalmente documentada en 2017 por un agente especial supervisor anónimo, el informe estaba lleno de “información esencialmente falsa e información fundamental omitida”, determinó el reporte de Horowitz.

La oficina tampoco compartió las acusaciones con las agencias policiales estatales o locales.

No te pierdas: Comité Olímpico de EU sabía de los abusos sexuales a atletas y no hizo nada

“Los niños sufrieron innecesariamente porque varios agentes en varias oficinas del FBI se negaron a compartir las acusaciones contra Nassar con sus homólogos de las fuerzas del orden público en las agencias estatales y locales”, dijo el republicano Charles Grassley en declaraciones preparadas.

“De manera inquietante, el abuso ocurrió a manos de alguien a quien se le confió su tratamiento médico y bienestar”, agregó.

Horowitz también dijo que Abbott, quien se retiró del FBI en 2018, también violó la política de conflicto de intereses del FBI al discutir un posible trabajo con el Comité Olímpico de Estados Unidos mientras estaba involucrado en la investigación de Nassar.

Ni Abbott ni el agente especial supervisor no identificado que estropeó la investigación de Nassar fueron procesados por sus acciones.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

 

Siguientes artículos

Foto: Cortesía de UNIVA
Cómo adaptar la educación en tiempos de crisis
Por

El reto de la universidad UNIVA es promover escenarios interactivos y flexibles para favorecer el aprendizaje tanto en e...