El bajo volumen de acciones negociadas o intercambiadas hacen que una compra o venta con buena utilidad sea aún más difícil.       La “bursatilidad” de una acción representa la liquidez que tiene un determinado título, es decir, la facilidad con la que puede ser comprada o vendida, y mucho tiene que ver con el volumen de acciones que intercambian manos. Una acción de alta bursatilidad puede tener un volumen bajo en determinados días. En cambio, una acción de baja bursatilidad implica que tiene poca actividad y por ende bajos volúmenes. Una baja bursatilidad introduce un factor de riesgo adicional a la actividad de compra-venta de acciones, aunque por otro lado, es un factor que en el caso particular de la Bolsa Mexicana de Valores, facilita la selección de aquellas emisoras que están funcionando mejor que otras. No obstante, es una lástima que el 43% de las 143 emisoras estén consideradas como de baja o mínima bursatilidad. El primer problema de un volumen bajo es la facilidad con la que se puede entrar y salir (comprar o vender) una acción, y además, al precio que uno considera como el adecuado. El segundo problema es similar, pues si el precio de una posición que se tenga en el portafolio empieza a bajar, puede ser difícil encontrar compradores, y para cuando los haya, la pérdida puede haber incrementado sustancialmente. La otra forma en que un bajo volumen puede ser contraproducente para tu inversión, es que no se puede usar como un indicador de la fuerza e interés del mercado por un título en particular. De por sí, al ser de baja bursatilidad, no se puede tener una impresión clara sobre la demanda u oferta reales por el valor. El que una empresa sea conocida y tenga renombre, no implica que exista interés por sus títulos, ni que éstos se intercambien activamente. Las alzas y bajas obedecen a operaciones “de unas cuantas acciones, realizadas por unas cuantas entidades”, y puedes quedar atrapado en el intercambio de esos pocos jugadores. Mira la gráfica de Palacio de Hierro. blog1   En ella se observa que puede pasar mucho tiempo si compraste en un día de gran movimiento a la baja, porque esperabas que el precio subiera (digamos en enero, 2013). De hecho lo hizo, pero si hubieras deseado realizar la utilidad, es posible que fuese hasta mediados de julio, cuando hubo solo un día de movimiento en donde “quizá” hubieras podido vender, y eso con muy poca probabilidad de que ocurriera. Es un riesgo muy alto que se debe evitar. Gráficas así deben darte la pauta para buscar mejores oportunidades. Esta otra gráfica te muestra los volúmenes promedio de las emisoras en la BMV y su respectiva clasificación. El hecho de que exista una proporción elevada de títulos de baja bursatilidad implica un riesgo adicional “de mercado”, ya que si solo una proporción de ellas tienen niveles “aceptables” de bursatilidad, limita la diversificación que en teoría se debe tener para incrementar las probabilidades de tener éxito como inversionista. Es necesario establecer un volumen mínimo aceptable para operar con mayor confiabilidad. blog2   Contacto: Página web: www.mentorenacciones.com Correo-e: [email protected]     —————————— www.MentorenAcciones.com es un sitio de Internet orientado a educar al inversionista común, en el que se retoman temas actuales, teniendo como objetivo ayudar al inversionista de hoy, así como potenciar el desarrollo de una cultura financiera, para poder participar con otros inversionistas experimentados, en igualdad de circunstancias, proveyendo herramientas de análisis mediante material audiovisual, por lo menos 4 veces por semana. Éstos cuentan con un gran énfasis gráfico y se distinguen por ser claros y concisos.   *Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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