El periodismo de datos no se trata sólo de publicar hojas de Excel con cientos de gráficos inentendibles, tampoco va de números y cifras, sino de contar historias. La actividad periodística debe ser capaz de hacer que el lector entienda de forma significativa un cambio o una tendencia a través de una narrativa sencilla, clara y que sea capaz de conmoverlo y hacerlo reflexionar.   Quizá una de las grandes fallas que tiene el periodismo digital sea la facilidad con la que los rumores se convierten en noticias; es común observar que muchos medios retoman supuesta información que proviene de diferentes medios, blogs o redes sociales, sin verificar que las fuentes sean correctas y (menos) sin hacer una investigación previa. La labor del periodismo es, en buena medida, la de informar hechos verídicos y comprobables. Para hacerlo, es necesario realizar un proceso de verificación de información y de validación de fuentes. No obstante, ello requiere no sólo un esfuerzo de recursos humanos, sino de una serie de habilidades tanto de formación y profesionalización, como de uso de recursos digitales y análogos. Si consideramos la velocidad a la que se mueve la información digital, esto resulta cada vez más complicado porque los medios electrónicos requieren de una gran cantidad de noticias para mantenerse actualizados. Si a esto sumamos la lucha entre medios por ganar una exclusiva, la corroboración de datos se vuelve un lujo que no todos pueden darse. Aunque debería ser fundamental para el periodismo. Sin embargo, uno de los puntos fundamentales del periodismo es que pocos medios han entendido que si bien la materia prima que ofrecen son noticias, su principal diferenciador es ser un medio de comunicación reconocido y confiable, y los reportajes y la información ampliada y verificada es su principal valor agregado. Esto mismo le da un sentido de validez y pertenencia al periodismo independiente y ciudadano, ya que un punto muy importante para el reconocimiento y la construcción de la reputación digital radica en la profundidad y la interpretación de los datos. No se trata de infraestructura, sino de habilidad: la mayor parte de la data se encuentra de forma libre y/o gratuita alojada en instituciones o bases de datos abiertas. Lo importante es la forma en la que interpretamos y explicamos. Ahora bien, el periodismo de datos no se trata únicamente de publicar hojas de Excel con cientos de gráficos inentendibles, tampoco va de números y cifras, sino de contar historias. Es decir, que la actividad periodística sea capaz de hacer que el lector entienda de forma significativa un cambio o una tendencia a través de una narrativa sencilla, clara y que sea capaz de conmoverlo y hacerlo reflexionar. Un buen ejemplo de periodismo de datos es el que realiza Gapminder (http://www.gapminder.org/), un sitio web que a través de gráficos y estadísticas nos recuerda las grandes diferencias que existen en la distribución de la riqueza y el bienestar en el planeta. Según Paul Bradshaw, fundador del sitio Online Journalism Blog (http://onlinejournalismblog.com/) el periodismo de datos tiene la estructura de una pirámide invertida y considera 5 puntos fundamentales:
  • Compilar: Cualquier investigación inicia siempre por la búsqueda y recopilación de información. Bases de datos, informes, resultados y demás fuentes por lo general están abiertas, digitalizadas y al alcance de la mano, sólo hace falta buscar.
  • Limpiar. Una vez que recabamos los datos, es muy importante que distingamos lo que puede ayudarnos de lo que sólo es paja. Limpiar, ordenar y clasificar es una de las tareas más importantes del periodismo de datos, pues es en ese momento en que la información empieza a construirse.
  • Contextualizar. Miles de cifras no sirven si no entran en el contexto adecuado. El contexto no sólo sirve para ubicar la procedencia de la información, sino para entender la profundidad y alcance que tiene. Los números no dicen nada; son las personas quienes generan esa información y siempre debe ir ligada a ellas.
  • Combinar. Un dato no sirve si no se pone en contexto y se completa con otro. Ello nos permitirá hacer conclusiones y encontrar incidencias de un segmento sobre otro. Por ejemplo, ¿cómo incide la pobreza en la generación de violencia? ¿Existe relación entre vacaciones e infecciones gastrointestinales? Muchas veces el periodismo de datos inicia con una pregunta; el error es creer que la respuesta es del dominio público. Siempre una respuesta argumentada requiere la combinación de varios elementos y conceptos.
  • Comunicar. Una historia que pueda contarse adecuadamente necesita gráficos, infografías, fotografías y estadísticas que no únicamente estén bien hechas, sino que permitan la asimilación de conceptos y generen empatía con el lector, además de ser visualmente atractivas y fáciles de leer.
El periodismo de datos es quizá una de las actividades que tendrán que desarrollar las empresas de comunicación para competir de forma adecuada y pujante en la comunicación digital. Cualquiera puede presentar una noticia, la diferencia radica en ampliarla, sustentarla y comunicarla adecuadamente, convirtiéndola en una historia digna de ser contada.   Contacto: Correo: [email protected] Twitter: @sincreatividad   *Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.  

 

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