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Estas son las 30 promesas de los negocios 2024

La incertidumbre se instaló en México y el mundo desde antes de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara la pandemia por Covid-19 a mediados de marzo de 2020 y, por lo tanto, merecía elevar a lo más alto el nivel de emergencia sanitaria global.

El pesimismo en esos días era tal que los mercados reflejaron ese sentimiento generalizado. El índice principal de la Bolsa Mexicana de Valores cerró el primer trimestre de 2020 con una caída de 21%, mientras que el peso se depreció 25% frente al dólar.

No era para menos. El confinamiento se había iniciado y la pesadumbre aventuró a algunos a sugerir que habrían de pasar tres o cuatro largos meses para que el contacto social y, por ende, diversas actividades económicas, volvieran a la normalidad.

Ese panorama trasquiló el valor de compañías de casi todos los sectores ante un menor apetito de riesgo y, así, las fortunas de los magnates mexicanos cayeron, en su mayoría, a ritmo de doble dígito.

Al inicio de la pandemia de Covid-19, familias como los Servitje Montull y Jorba Servitje, dueños de la panificadora Bimbo, o bien los González Moreno, del distribuidor de harina de maíz y tortillas Gruma, habían reducido su patrimonio a la expectativa del impacto que tendría un fenómeno mundial sin precedentes en un siglo y con un mundo más conectado que nunca. En esos momentos, de poco les valió ser líderes mundiales en industrias tradicionalmente defensivas, como el consumo, que no estaban destinadas a parar.

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A un año de esa estampa, todavía no hay alumnos en las escuelas, no se ha realizado ningún evento “masivo” e, incluso, cualquier actividad trivial, como lo es ir de compras o comer en un restaurante, sigue siendo riesgosa.

Sin embargo, también a la distancia las expectativas son menos negativas. Salvo casos muy concretos, como la escasez de semiconductores para la industria automotriz a nivel mundial, los frenos a cadenas productivas son cada vez menores y más selectivos. El consumo también es más flexible a partir de la mayor infraestructura para el comercio electrónico.

Desde luego, la certidumbre de alcanzar una normalidad menos restrictiva la otorgaron las vacunas, cuya aplicación comienza a masificarse en México.

El cambio de liderazgo en la Casa Blanca también jugó a favor. La elección de Joseph R. Biden como presidente de Estados Unidos es celebrada por quienes consideran que puede recomponer el manejo de la pandemia frente a las acciones de su antecesor, Donald J. Trump. Dos meses le bastaron para establecer un plan de vacunación ambicioso con el que espera vacunar completamente a su población adulta, al tiempo que consiguió la aprobación de un estímulo económico de 1.9 billones de dólares.

Tras un periodo desafiante que frenó el consumo y las inversiones en México a tal grado que la economía sufrió su peor caída (-8.5%) en 90 años, la actual coyuntura es el principal aliciente para que 27 de las 35 mayores fortunas de México incrementaran su patrimonio. Sólo Emilio Azcárraga, dueño de Televisa, lo redujo.

La suma de la riqueza de los 36 mexicanos y mexicanas que conforman el listado de millonarios pasó de 133,400 a 171,490 millones de dólares (mdd), esto, entre principios de 2020 y comienzos de 2021, un alza de 28% que supone un auténtico rebote desde la caída de 21.5% hace un año.

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“La recuperación económica se plantea como el escenario base, no solamente para México, sino también para el contexto internacional”, dijo, en entrevista, Carlos Hernández, analista de Masari Casa de Bolsa. “Probablemente, este año va a ser bastante bueno para la economía, saliendo incluso hacia parámetros relevantes, algo que no se ha visto en la última década en tasas de crecimiento”.

Los pronósticos de distintas instituciones mejoraron con el inicio el año.

Banxico elevó sus estimados de crecimiento de 2021 y 2022 y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, encargada de administrar las finanzas públicas, ya anunció que actualizará sus perspectivas en el mismo sentido a cerca de 5%.

De igual, forma, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) mejoró sus estimados de crecimiento para México y, en general, para el mundo, a partir de un mejor desempeño esperado para Estados Unidos, socio principal de la segunda economía latinoamericana y la economía más grande del mundo. De concretarse los pronósticos, la economía mundial podría regresar a niveles de 2019 a mediados de este año.

“La economía rebotó más rápido que lo esperado a sus niveles prepandémicos”, aseguró, a inicios de marzo, Lawrence Boone, economista en jefe de la OCDE, en conferencia de prensa sobre la actualización de los pronósticos.

Algunos sectores industriales no tendrán que esperar unos meses para mejorar su situación tras la pandemia porque tuvieron la oportunidad de crecer durante la pandemia. Después de sacudirse la incertidumbre de marzo y abril de 2020, diversas empresas de consumo incluso prosperaron.

“Hay algunos sectores que se han recuperado más rápido que otros. Esto se puede explicar por diversos factores. Hay empresas del sector consumo cuyas acciones han subido de manera muy importante, sobre todo las que operan en Estados Unidos”, dijo Jacobo Rodríguez, director de Análisis Financiero de la firma de asesoría BlackWallStreet Capital.

Juan Francisco Beckmann, a cargo de Becle, la compañía de bebidas alcohólicas que tiene entre sus marcas a la emblemática Jose Cuervo, elevó su fortuna más de 67% en un año en el que el tequila reportó exportaciones a niveles récord. La propia familia González Moreno, de Gruma, también incrementó 52% su fortuna gracias a su presencia en Estados Unidos.

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Incluso la familia Hernández Pons, de la productora de alimentos procesados Herdez, entró este año al listado tras superar los 500 mdd de patrimonio.

En el mismo sector, la familia González Nova, principal dueña de la cadena de autoservicios La Comer, aumentó 27% su patrimonio en el año, gracias no sólo a su pertenencia en un sector esencial, sino a que atiende a un tipo de cliente que genera mejor rentabilidad.

Otros nombres y apellidos que se integraron al listado formaron su riqueza a partir de negocios en otras industrias. Aquí destaca la familia Brockman, que controla la aseguradora de autos Quálitas, un negocio que se benefició de un confinamiento que redujo los siniestros viales. En bolsa, Quálitas también tuvo un año intenso, al ingresar por primera vez a la muestra de las 35 empresas que conforman el índice S&P/BMV IPC.

A finales de enero, los Brockman lamentaron el fallecimiento de Joaquín Brockman Lozano, fundador y presidente de la aseguradora.

Pablo Legorreta aún es un nombre que resulta poco familiar. Su fortuna proviene de su revolucionario y exitoso negocio de licencias de medicamentos, Royalty Pharma. En junio debutó en los mercados de Nueva York y, en ese entonces, irrumpió como uno de los 10 mexicanos más ricos. Su fortuna está valuada hoy en 2,590 mdd.

Aunado a los avances en la vacunación en las economías desarrolladas y algunas en desarrollo, están las bajas tasas de interés sin la perspectiva de que suban pronto, así como el paquete de estímulo económico aprobado en Estados Unidos, por 1.9 billones de dólares, la más grande de las intervenciones monetarias realizadas en ese país, incluso desde la administración del expresidente Donald Trump.

Esto impactará, dijo Hernández, de Masari, no sólo a las compañías bien posicionadas en la pandemia, sino también a las que fueron más perjudicadas y cuyas valuaciones fueron más castigadas cuando las perspectivas eran peores, como el consumo discrecional o los bancos, por lo que la mayoría de los sectores (y las fortunas) se vieron fortalecidas.

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Los magnates mineros Germán Larrea y Alberto Baillères revirtieron con sus extractoras de metales la caída de su riqueza en 2020 y, más que compensar el mal paso de otros de sus negocios, como los cines o las tiendas departamentales, encontraron una excelente veta para seguir creciendo. Sustentándose en Grupo México, Larrea incrementó 146% su riqueza de un año a otro, mientras que Baillères, haciendo otro tanto con Industrias Peñoles, sumó a su fortuna otro 64%.

El caso de los metales industriales es un tanto más claro, pues su demanda está ligada a la recuperación económica y el precio del cobre cotiza ahora en máximos de casi una década. Por su parte, el oro y la plata, activos tomados habitualmente como refugio, también cotizan por encima de lo registrado en siete años, aunque debajo de los precios de 2020.

Esto sucede, de acuerdo con el experto de Masari, porque la plata también es utilizada en la industria, mientras que el oro no sólo es referente en malos tiempos, sino que se utiliza para diversificar portafolios (pues aún estamos en medio de la pandemia) y ante otros temores, como el de la aceleración de la inflación por el exceso de liquidez.

En medio del entusiasmo, hubo fortunas que se estancaron, como la de David Peñaloza Alanís (que bajó seis lugares en la lista), accionista mayoritario de la concesionaria carretera Promotora y Operadora de Infraestructura, mejor conocida como Pinfra, que sufrió, tanto en aforo como en ritmo de construcción, los efectos de la pandemia.

Por su parte, el único multimillonario mexicano que sufrió minusvalías en su patrimonio fue Emilio Azcárraga Jean, dueño principal de Televisa, una empresa que ha visto crecer más su negocio de telecomunicaciones este último año, lo que se explica por las necesidades de diversión e insumos para trabajar y estudiar a distancia, pero que también ha estado lastrado en los últimos años por su decadente negocio de publicidad.

El indiscutible líder de la lista en México, Carlos Slim Helú, incrementó 7.4% su riqueza ante lo necesarios que fueron los servicios de telecomunicaciones (más los fijos que los móviles) durante el confinamiento, aunque el alza no fue suficiente para borrar la caída de 19% que sufrió su fortuna un año atrás.

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La salida de la crisis sanitaria de Covid-19 y económica es apenas perceptible; sin embargo, las buenas perspectivas no están libres de riesgos y, por ahora, el enfoque está en la inflación y en el propio proceso de vacunación.

La extraordinaria inyección de dinero que aprobó Estados Unidos podría suscitar una ola inflacionaria. Por ahora, ésta no se ha disparado e, incluso, los últimos datos quedaron por debajo de las expectativas, y la visión de la Reserva Federal es que la aceleración será momentánea, por lo que no tiene planes de intervenir en el corto plazo.

En cuanto al tema de las vacunas, las preocupaciones están tanto en el abastecimiento como en la aplicación, que, si bien se ha acelerado en los últimos días, parece que no cumplirán con los calendarios establecidos en un principio. En México han sido aplicadas, al cierre de esta edición, alrededor de 5 millones de dosis en una población de 126 millones de personas.

Para Rodríguez, de BlackWallStreet Capital, éstos no son motivos suficientes para frenar el entusiasmo que ha impulsado las fortunas de los hombres y mujeres más acaudalados de México pese a la pandemia.

“Siempre hay factores de riesgo en las finanzas, pero lo que tú haces es valuarlos e incorporarlos en tus modelos de riesgo. Hay que ver la probabilidad de que se materialicen [estos riesgos] y qué impacto tendrían en los portafolios de inversión”, concluye Rodríguez.

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