Este texto se publicó originalmente el 11 de julio de 2017.
Lejos de presentar afectaciones, el sector turístico en México se benefició de la volatilidad y depreciación del tipo de cambio, el resultado del proceso electoral de 2016 en Estados Unidos y el entorno de incertidumbre internacional que impactaron de forma negativa a otros sectores de la economía.
Esta industria representa 8.7% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, cifra que sorprende por ser mayor a la contribución del petróleo, que asciende a 7%, afirma Teresa Solís Trejo, subdirectora de Planeación y Políticas Turísticas de la Secretaría de Turismo.
“El sector turismo es una industria, que por su dimensión y por ese desempeño en años recientes, se está convirtiendo en uno de los motores de la economía nacional”, dijo en entrevista con
Forbes la funcionaria federal.
El turismo también supera a otras industrias como la minería, la construcción y servicios financieros, por ejemplo.
En la pasada edición del Tianguis Turístico celebrado en Acapulco, funcionarios mexicanos, inversionistas y organismos en la materia se mostraron positivos frente al crecimiento de este sector durante los últimos cuatro años y en palabras del secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, el turismo es una opción importante de crecimiento económico frente a la caída de los precios del petróleo.
“Los mexicanos gastamos mucho menos de lo que gastan los extranjeros que vienen a México, la balanza siempre ha sido superavitaria, lo cual de alguna manera nos ayuda a compensar la baja de otras fuentes de divisas como es la industria petrolera, que fue una fuente de divisas fundamental y que el día de hoy es deficitaria, gastamos más en compra de gasolinas que lo que se exporta por materia de compra de petróleo”, explicó.
En 2016, llegaron al país 34.9 millones de turistas internacionales, representando un incrementó de 8.9% respecto a los ingresos registrados en 2015, de acuerdo con datos de la Secretaría de Turismo.
La derrama económica del año pasado por la llegada de turistas internacionales ascendió a 19 mil 600 millones de dólares.
“Esto permitió a México colocarse en el octavo lugar en llegada de turistas a nivel internacional, estábamos en el noveno el año pasado y hemos avanzado desde el lugar 14 en esta administración al lugar 8, si es avance importante”, explicó Solís Trejo.
Para este año la Secretaría planteó una meta de 37 millones de turistas internacionales, es decir, un aumento de 6% con relación a 2016, pero en lo que va del primer trimestre de este año la llegada de turistas fue de 9.3 millones y se registró un ingreso de divisas de cinco mil 781 millones de dólares.
Además de la labor de promoción turística a cargo de las autoridades federales, el ascenso del interés de los turistas internacionales de México podría deberse a la ola de atentados terroristas en países de Europa, la inestabilidad política de oriente medio y la hostilidad de la administración de Estados Unidos a los extranjeros, explicó la subdirectora de Planeación y Políticas Turísticas.
Pero la confianza de los viajeros no siempre estuvo en favor de México. En 2009 la crisis financiera de Estados Unidos y la epidemiológica que se detectó en el país por el virus del H1N1, que incluso fue nombrado como el Mexican Flu alejó a los turistas extranjeros de las playas, pueblos y ciudades mexicanas.
“La industria turística es muy sensible a ese tipo de fenómenos y tuvimos una caída importante e el 2009 en relación con las cifras de 2008”, explicó.
Pero la industria turística mexicana no sólo se recuperó rápidamente, sino que en 2016 la entrada de viajeros internacionales y la derrama económica que se generó fe de cifras históricas.
Aunque el principal atractivo del país en materia turística continúa siendo las playas, la dependencia encargada de la política turística del país tiene por objetivo impulsar el turismo sustentable.
“Desarrollar nuevos productos de alto valor que además van muy afines a las tendencias del mercado, los países emisores no solamente están dispuestos a viajar sino a pagar por experiencias auténticas y con su viaje apoyen a comunidades y países a los que viajan”, aseguró.
