Invitada al evento con el que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) celebró el Día Internacional de la Mujer, la actriz mexicana Yalitza Aparicio abogó por el reconocimiento y el acceso laboral del género femenino. Desde Ginebra, en entrevistas y en un panel, la nominada al Oscar a Mejor Actriz destacó la importancia de que las mujeres sepan que pueden trabajar y salir del rol social de quedarse en la casa y ser mantenidas por hombres. En una conversación en el auditorio de la OIT con la conductora británica de televisión Femi Oke, Aparicio dijo estar orgullosa de estar contribuyendo al cambio en México, gracias a que ha hecho saber a las mujeres que sí pueden hacer lo que antes creían que les era imposible. La protagonista de la película “Roma” estuvo acompañada por Marcelina Bautista, fundadora del Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar, actividad a la cual se dedican 67 millones de personas en todo el mundo, 80% de ellas mujeres, indígenas, inmigrantes y niñas. Aparicio narró pormenores de su trabajo en la cinta dirigida por Alfonso Cuarón, galardonada en diversos festivales cinematográficos en el mundo, incluyendo los premios Oscar. La también licenciada en Educación Preescolar se declaró afortunada de que a diferencia de muchas otras jóvenes, en particular de grupos originarios en México, su familia no le haya inculcado los roles tradicionales de crecer y casarse, a pesar de que por la influencia de los medios, la creencia general es que no hay mucho futuro para las mujeres. Narró que le preguntaban de pequeña para qué estudiaba, que era mujer y tenía que quedarse en la casa. “Que me iba a casar y ese era mi futuro”, recordó ante Oke, de origen nigeriano. “Pero por suerte, crecí en una familia increíble que me decía que el hecho de que fuera mujer no me impedía hacer cosas, viajar y luego, si quería, casarme”. Reveló que ha recibido cartas de mujeres jóvenes de su comunidad en el estado de Oaxaca, en que le aseguran que ahora están convencidas de que pueden hacer lo que deseen, dedicarse a cualquier tipo de actividad. Recordó que ella estaba apartada de los medios de comunicación por voluntad propia, pues no se veía reflejada por ellos, y cuando se enteró de las pruebas de actuación que realizaba Alfonso Cuarón para “Roma”, lo investigó a él y a otros miembros de la producción, pues pensaba que era una farsa. Ya en el elenco del filme, su director le hizo darse cuenta que podía llegar a más, que no tenía que ser conformista, que había que experimentar, recordó quien se sigue considerando profesora. Indicó que la mayoría de los actores de la cinta tampoco son profesionales, salvo Marina de Tavira, quien le enseñó que el apoyo entre mujeres es muy importante, y siempre le asesoró en lo que no comprendía. Oke cedió luego la palabra a Marcelina Bautista, quien señaló que las trabajadoras domésticas merecen respeto y un sueldo justo. Bautista refirió que en la película el personaje de Cleo, que interpreta Yalitza, y el de la ama de casa actuado por de Tavira, son solidarias, pero no debe de perderse de vista su relación laboral, el de una trabajadora y su empleadora. En ese sentido, la película retrata la realidad de millones de trabajadoras del hogar en el mundo, donde la tendencia es a la sumisión por la necesidad que tienen del empleo. La película, subrayó, nos hace entender que la desigualdad es la que nos ha hecho diferentes a las mujeres y que las mujeres necesitamos reconocernos como trabajadoras, porque todas somos trabajadoras. La visión de la relación laboral se pierde cuando a las trabajadoras del hogar se les dice que son parte de la familia, lo que impide el ejercicio de sus derechos laborales, acotó. Las mujeres debemos trabajar para pasar de la desigualdad a la sororidad (concepto que refiere la hermandad entre mujeres capaces de solidaridad y de cambiar su realidad), indicó la líder sindical. Con información de Notimex

 

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