Farmacias GI se prepara para dar la batalla por el liderazgo en medicamentos genéricos intercambiables. En los próximos tres años, la empresa mexicana espera sumar cerca de 2,000 sucursales, al abrir en ese lapso 500 nuevas ubicaciones en el país.
“Somos conservadores en nuestras previsiones, pero el interés de los inversionistas nos hace fijarnos una meta más alta para 2018″, dice en entrevista Roberto León Muñoz, director general de Farmacias GI.
En la actualidad, la cadena de farmacias que comercializa medicamentos genéricos cuenta con más de 1,200 ubicaciones en el país, la cuales se han abierto, principalmente, a través del modelo de franquicia.
La competencia será dura para el retador. Farmacia de Similares cuenta con más de 4,000 sucursales y franquicias establecidas en México, Chile y Guatemala.
León Muñoz reconoce que es su principal competidor. “Directamente es (Farmacias) Similares, que es el líder en el rubro. Farmacias Similares es contra quienes estamos compitiendo en la actualidad”.
El directivo de GI prefiere no mencionar la inversión en las nuevas sucursales por la variación en los costos que pueden tener los locales, aunque comenta el monto promedio destinado a la apertura de una farmacia de la cadena es de 430,000 pesos.
“No queremos incluir la venta de refrescos, jamón o pan en nuestras tiendas como lo hacen otras cadenas; vamos a enfocarnos a satisfacer la demanda de medicamentos que los clientes quieren, a pesar de no ser genéricos, ya que eso también nos permitirá conocer el ahorro que representa para los clientes el adquirir medicamentos genéricos”, asegura León Muñoz, después de participar en el foro WPP Global Retail Forum.
En los últimos meses, Farmacias GI ha iniciado la remodelación de sus establecimientos existentes, cuyo objetivo se enfoca en posicionar su imagen y consolidar su operaciones para iniciar la expansión este año.
La empresa de Roberto León ofrece 9 millones de consultas anuales, y espera que el incremento de establecimientos le permita elevar esta cifra en 20%.
Durante 2012, el ticket promedio de la cadena era de 50 pesos, pero las condiciones adversas en la economía familiar han llevado a que el monto asciende este momento a los 100 pesos por cliente.
Adolece por la inseguridad
Roberto León Muñoz ve con buena salud el crecimiento de su negocio, pero la delincuencia es una amenaza latente. El año pasado, la empresa tuvo que cerrar más de 6 ubicaciones en Nuevo León, debido a los problemas de inseguridad en el estado del Norte.
