El mercado inmobiliario de Nueva York, el más grande de Estados Unidos, está viviendo una acelerada recuperación, luego de ser duramente golpeado por una caída en la demanda. Ahora registra una llegada masiva de compradores de Latinoamérica.
La crisis sanitaria ralentizó las ventas de inmuebles en Estados Unidos, debido a la prohibición gubernamental a la llegada de viajeros internacionales. La medida impidió que los posibles compradores pudieran conocer personalmente las propiedades en venta.
Muchos estadounidenses optaron por comprar residencias de manera virtual, utilizando recorridos en video y tecnología 3D para tener una idea de cómo verían y se sentirían en las propiedades. Pero los compradores internacionales no adoptaron en la misma proporción estos recursos tecnológicos.
De acuerdo con María Velázquez, líder en el sector que vende propiedades de lujo en Nueva York y en la Florida, con la reapertura de la nación a los visitantes extranjeros, los compradores extranjeros están aprovechando la oportunidad para viajar a Estados Unidos e invertir en residencias en las ciudades más atractivas, como lo es Nueva York.
“Lo que sucede es que los inversionistas de otros países están más habituados a sentir y tocar directamente sus inversiones”, apunta Velázquez.
La actividad de ventas se está fortaleciendo en la ciudad de Nueva York. Diciembre de 2020 marcó un punto de inflexión clave a medida que la actividad de ventas avanzó y, para febrero de 2021, el número de contratos firmados para condominios en Manhattan aumentó un 55% interanual.
La participación de mercado de los compradores internacionales en Nueva York fue de 15% en 2020, lo que indica un grado sorprendente de resistencia a pesar de que exigieron prohibiciones de viaje durante la mayor parte del año. Es probable que los números aumenten a medida que disminuyan las restricciones de viaje.
Junto con Canadá, México aportó el mayor segmento de inversionistas internacionales en el mercado de bienes raíces residenciales de Estados Unidos en el último año antes de la llegada de la pandemia, y se espera que suceda lo mismo en la nueva normalidad. Países como Argentina, Brasil y Perú continúan siendo compradores en este mercado.
“De hecho, los precios en otro mercado codiciado, el del sur de la Florida, han subido considerablemente, lo cual favorece la inversión en Nueva York al reducirse la diferencia de precios entre ambas regiones e incluso igualarse en muchos casos. Comprar una propiedad residencial en Nueva York es una inversión que ofrece grandes ventajas, debido a la fortaleza del mercado de la Gran Manzana, el enorme atractivo y las numerosas comodidades de la bellísima y famosa ciudad que muchos llaman la capital del mundo”, afirma la agente inmobiliaria.
Velázquez, originaria de Colombia, tiene casi 20 años de experiencia en el sector y suma cerca de mil millones de dólares en transacciones cerradas. Ha roto récords de ventas y se ha convertido rápidamente en una de las agentes más reconocidas y distinguidas en Manhattan.
Es la agente inmobiliaria para América Latina de Compass, una empresa estadounidense de venta de bienes raíces, fundada en 2012, que combina a los mejores agentes con la tecnología más avanzada y un marketing de primera. Compass, la agencia independiente número uno de su sector en los Estados Unidos en volumen de ventas, tiene centros de innovación en Nueva York, Washington e Hyderabad.
“Nueva York siempre será un mercado favorecido por los compradores de alto nivel por su seguridad y el valor creciente de las propiedades”, afirma Velázquez. “Los inversionistas mexicanos lo saben y creo que seguirán estando a la cabeza de los principales clientes del mercado residencial neoyorquino”.
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