Los restaurantes en la capital del país están cerca de alcanzar las máximas capacidades permitidas por las autoridades de la Ciudad de México, de 30 a 40% según tenga o no terraza, pero los ingresos obtenidos apenas alcanzan para perder lo menos posible, de acuerdo con Marco Buendía, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac).

De cara a los festejos patrios, reconoció que si bien a partir de la reapertura de estos negocios en la ciudad los comensales han ganado confianza y los lugares han comenzado a ganar en ocupación, los ingresos con aforos limitados son insuficientes para gastos como la renta o el pago de servicios.

“Empezamos regular, ya vamos mejor, regular porque nos dieron 40% de aforo máximo con terraza, y empezamos con un 20% de ocupación, ahorita ya hemos de andar entre el 30 y 40% del aforo, pero no es suficiente porque para llegar a un punto de equilibrio necesitamos el 70% de las ventas, por lo menos.”, señaló.

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Resaltó que en lo que va del año se ha reportado el cierre de unas 2 mil unidades dedicadas a la venta de alimentos preparados observable en sus bajas de afiliaciones.

A partir de julio, los restaurantes pudieron abrir sus puertas en la capital del país con aforo máximo de 30% en establecimientos cerrados y de 40% en locales con terraza al aire libre. Durante las primeras dos semanas, diversos restauranteros reportaron ocupaciones de alrededor de 15 a 20%, es decir, apenas la mitad de la capacidad permitida.

Además, los restaurantes tuvieron que lidiar con los gastos adicionales por el equipo de protección y suministros para la sanitización, así como tomar medidas para implementar sistemas de reservas en línea o por teléfono para evitar filas, así como limitar el uso de menús y cambiarlo por cartas digitales, en pizarras o desechables.

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En el marco de la celebración del 210 aniversario del inicio de la Guerra de Independencia, Buendía lamentó que a raíz del primer cuadro de la ciudad para la ceremonia oficial del presidente se haya cerrado el acceso, lo que afectó a alrededor de 800 establecimientos dedicados a la venta de alimentos.

“El 15 y 16 realmente los que se beneficiaban mucho eran los hoteles, todos tenían noches mexicanas y restaurantes son muy contados, no son muchos, solamente los que tienen suficiente capacidad, pero limitado el aforo y el horario no hay forma de festejar”, comentó en entrevista con Forbes.

Para este año, apenas 1 de cada 10 mexicanos contemplaba celebrar fuera de su casa las fiestas patrias, de los cuales apenas el 3% contemplaba acudir a un bar o restaurante para la ocasión, en tanto que alrededor de 15% planeaba pedir comida a domicilio. de acuerdo con una encuesta de Kantar.

En cuanto a la celebración, destacó que alrededor de unos 4 mil restaurantes dedicados a la venta de comida mexicana reportarán mayores ventas a raíz sobre todo de los pedidos a domicilio y las promociones a través de plataformas de envío.

Por ahora, acotó, el sector dependerá de la evolución del semáforo de la Secretaría de Salud, con miras a que cambie a color amarillo, con lo cual puedan aumentar la capacidad en sus establecimientos.

 

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