Por Máximo Santos Miranda* Hace unos días expuse en este mismo espacio, la necesidad que tenía México de diversificar sus relaciones comerciales para no depender en tan gran medida de su socio del norte. En dicha colaboración señalé que uno de los países que México debería priorizar en esta estrategia era la India y es que, por las razones entonces expuestas, la India debería ser un socio mucho más relevante para México de cara al futuro. Además de la India, otro actor que debería presentar un papel mucho más importante para México en las relaciones comerciales en los próximos años es el continente africano, un enorme territorio al que México prácticamente ha ignorado a lo largo de su historia. África es un extenso continente conformado por 54 países y que, a pesar de contar con graves problemas, conflictos y pobreza, está experimentado en los últimos años niveles de crecimiento sostenido destacables en muchos de los países que lo conforman. Se trata de un continente joven que está creciendo por encima de la media de los países en desarrollo, gracias a la política macroeconómica prudente que están llevando a cabo muchos Estados africanos. El continente cuenta con una dotación extraordinaria de recursos naturales, especialmente minerales y petróleo, además de ser un exportador de primer orden de ciertos productos alimentarios. En relación a los productos agrícolas hay que tener en cuenta que más de una cuarta parte de la tierra cultivable del planeta se encuentra en el continente africano y en la actualidad la región sólo genera el 10% de la producción agrícola mundial. Por este motivo, el sector agrícola africano presenta de cara al futuro una enorme potencialidad si se llevan a cabo inversiones adecuadas en un entorno geopolítico estable. El continente cuenta en la actualidad con algo más de 1.200 millones de habitantes, lo que hace que sea ya hoy en día mucho más poblado que Europa. Además, la tendencia, según los estudios que realiza las Naciones Unidas, es que, en el año 2100 de los 20 países más poblados en el planeta, diez estarán en África. Las proyecciones de la ONU estiman que en el año 2100 el continente contará con 4.500 millones de habitantes y esto supondrá nada menos que el 40% de la población del planeta frente al 16% que representa actualmente. Entre los países africanos será Nigeria el país más poblado del continente en esa fecha, con más de 700 millones de habitantes, y se situará como tercer país más poblado de la tierra tras la India y China. México se puede beneficiar de este crecimiento africano y diversificar sus relaciones comerciales, pero para ello, lo primero que México tiene que hacer es ampliar su presencia diplomática en África. En la actualidad, México cuenta únicamente con ocho embajadas en el continente que son las de Argelia, Egipto, Etiopía, Ghana, Kenia, Marruecos, Nigeria y Sudáfrica. No se trata de tener embajadas en todos y cada uno de los países africanos, ya que obviamente el abrir y mantener embajadas conlleva un importante coste económico, pero si en aquellos países que puedan representar una oportunidad para México y no sólo desde el punto de vista comercial. Las nuevas embajadas deberían dar servicio a varios países, pero para ello es preciso que estén distribuidas en puntos estratégicos clave del continente. Los intercambios con estos países africanos también se podrían extender a otros ámbitos como la educación o la cultura. Por otro lado, también habría que analizar si las embajadas existentes tienen la dimensión adecuada o será necesario potenciarlas. En el caso de Nigeria, que se va a convertir en un país con un peso notable en la escena internacional en los próximos años, debido a su enorme crecimiento poblacional, parece indicado reforzar las legaciones diplomáticas existentes. Pero no sería el único caso, Etiopía o Egipto, que alcanzarán o superarán respectivamente los 300 y los 200 millones de habitantes en el año 2100, según las proyecciones elaboradas por la ONU, también están llamados a convertirse en actores de mucho mayor peso en la geopolítica y las relaciones comerciales internacionales. A día de hoy, el comercio de México con África, a pesar de que ha venido creciendo en los últimos años, es escaso, muy concentrado en los países del Magreb y Sudáfrica y además es muy poco diversificado.  Las relaciones comerciales bilaterales en la actualidad apenas llegan a los 2.000 millones de dólares y tradicionalmente vienen siendo deficitarias para México. Para comerciar es preciso conocer las oportunidades que se presentan y tener perfectamente identificados cuales son las principales barreras que el exportador se puede encontrar. Por estas razones es importante contar con apoyo sobre el terreno y por eso el poseer legaciones diplomáticas y comerciales eficientes es clave en el apoyo al intercambio comercial. México puede exportar a África manufacturas y artículos de consumo final para las crecientes clases medias africanas, pero para ello es preciso detectar las oportunidades que existen. Si bien la competencia con otros países que están intentando posicionarse en la zona como China, India o Brasil no será sencilla, el potencial del continente es alto y su peso en la escena internacional va a ser creciente en los próximos lustros. Por todo ello, es perentorio que México tenga bien definida una estrategia presente y futura para África. *Doctor en Economía y experto en temas de banca, finanzas y hacienda.   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

pymes
Guerra de cifras: daño colateral para las pymes
Por

la tasa de mortalidad de las pymes en México es alta y las que se sobreviven tienen el enorme reto de mantenerse a la va...