El controvertido exjefe de la FIFA denunció esta mañana que la organización que otorga la Copa del Mundo 2022 a Qatar es una “mala elección”, citando problemas de derechos humanos en el país, lo que se suma a un creciente coro de críticas antes de que comience el torneo a finales de este mes.
“Qatar es un error”, dijo el ex presidente de la FIFA Sepp Blatter al periódico suizo Tages-Anzeiger, según Reuters, diciendo que el país del Medio Oriente, aproximadamente del mismo tamaño y población que Connecticut, es “demasiado pequeño” para el evento, y señaló que la selección no tuvo en cuenta “las consideraciones sociales y los derechos humanos”, según la traducción de Reuters.
La próxima Copa del Mundo ha sido un tema candente desde que la FIFA seleccionó al anfitrión bajo la supervisión de Blatter en 2012, el principal de los problemas es el trato de Qatar a los trabajadores que construyen estadios para el evento.
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Blatter fustigó la Copa de Qatar y aquí te contamos la controversia
Grupos de derechos humanos, incluidos Human Rights Watch y Amnistía Internacional, han denunciado las “pésimas condiciones de vida” de los trabajadores que rayan en la “esclavitud moderna”, y miles de muertes de trabajadores se han asociado con el enorme proyecto de construcción.
También está causando revuelo la postura del país sobre cuestiones sociales: la homosexualidad es un delito en Qatar, y las mujeres tienen derechos limitados y necesitan la aprobación de un tutor masculino para conducir o salir del país.
Aunque los organizadores han asegurado a los fanáticos LGBT que no enfrentarán discriminación, la protesta se intensificó el lunes después de que un embajador de la Copa Mundial de Qatar dijo que las personas homosexuales tienen “daño en la mente”.
El drama también ha seguido esta Copa del Mundo dentro del estadio: este será el primer torneo de este tipo que se llevará a cabo en invierno debido al calor extremo del verano de Qatar, y la experiencia de los fanáticos también se modificará: la embriaguez pública es un delito en el país. y las sedes de la Copa del Mundo contarán con áreas para que los fanáticos ebrios recuperen la sobriedad y eviten ir a la cárcel.
La FIFA seleccionó a Qatar para albergar la Copa del Mundo de este año hace 10 años bajo la supervisión de Blatter, quien fue expulsado de la FIFA en 2015 después de que el Departamento de Justicia hiciera públicas las denuncias de corrupción generalizada en la organización. El año pasado, los fiscales estadounidenses acusaron a los funcionarios de la FIFA de aceptar sobornos para otorgar el torneo a Qatar.
“Las reformas de Qatar son demasiado escasas, demasiado tardías y tienen grandes lagunas”, dijo Minky Worden, directora de iniciativas globales de Human Rights Watch, en un comunicado la semana pasada sobre los esfuerzos recientes del país para aliviar las preocupaciones sobre las condiciones de los trabajadores.
Este artículo fue publicado originalmente en Forbes US.
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