Cáncer de próstata: nuevas pautas de detección
La detección temprana en hombres sin síntomas puede ayudar a identificar a los que sí están en riesgo de tener problemas relacionados con el cáncer de próstata.
De acuerdo con las estadísticas del sector de salud, actualmente uno de cada siete hombres será diagnosticado con cáncer de próstata durante su vida, en algún momento. El cáncer de próstata es el segundo cáncer más común en el género masculino, por lo que las pruebas de detección, o bien la detección temprana en pacientes sin síntomas puede identificar a los hombres que están en riesgo de tener problemas relacionados con el cáncer de próstata y así beneficiarse de las pruebas adicionales.
Actualmente, el denominado PSA (antígeno prostático específico, por sus siglas en inglés) sigue siendo una de las herramientas de detección primaria más eficaces, ya que es una prueba de sangre que mide el nivel de una proteína específica producida por las células de la glándula prostática. No obstante, hay muchas consideraciones que entran en juego al momento de tener un examen de PSA.
De acuerdo con el Dr. Elias Hyams, urólogo de ColumbiaDoctors, de la práctica docente de Columbia University Irving Medical Center, “los urólogos interpretan los niveles de PSA en el contexto de otros factores de riesgo, tales como la edad, antecedentes familiares, así como el examen de próstata. A partir de esto determinamos la necesidad de pruebas adicionales”.
Si bien un nivel alto de PSA puede ser el primer indicio de cáncer de próstata, también existen otras afecciones mucho menos “amenazantes” que pueden producir resultados de prueba elevados.
“A medida que los hombres envejecen y la próstata crece, el PSA típicamente aumenta, por separado del riesgo de cáncer”, afirma el Dr. Hyams. “Esto puede causar falsas alarmas”. “Otras afecciones benignas que pueden incidir sobre el PSA incluyen infecciones y procedimientos del tracto urinario, así como ciertos medicamentos e hinchazón de la glándula prostática (prostatitis). Afortunadamente tenemos un repertorio creciente de herramientas para aclarar el riesgo en hombres con niveles elevados de PSA: sangre, orina, imágenes y otras pruebas para determinar quién realmente necesita una biopsia, en lugar de consuelo”, precisa el Dr. Hyams.